Liderazgo para el nuevo año

Es de todos conocido que cada principio de año muchos de nosotros, un servidor el primero, nos proponemos con energía renovada firmes objetivos y propósitos para el ejercicio que acabamos de iniciar. Después de fin de año y a medida que nos incorporamos a la rutina iniciamos la ejecución de varias de las estrategias que hemos ido madurando con la serenidad que las vacaciones nos hayan podido aportar. Este año 2021 todos los líderes de las empresas, mención especial a los empresarios y directivos de baleares, van a necesitar su mejor versión. Para empezar van a tener que mejorar aún más si cabe su paciencia. Recordando la sabia aclaración de Mario Alonso Puig, una persona a la que admiro profundamente, la paciencia no es aguantar sino aceptar el ritmo que la realidad y muchas veces la naturaleza nos impone. En este 1º semestre 2021, donde la incertidumbre va a continuar siendo la mayor certidumbre, la paciencia va a ser esencial para ir avanzando poco a poco, día a día, en conseguir superar, sobrevivir a este tsunami económico que por lo menos ya no nos pilla por sorpresa. Otro de los consejos que nos podría dar el Dr. Alonso Puig sería que revisemos nuestro nivel de compromiso con nuestro proyecto. El verdadero compromiso entiende de dificultades, no entiende de excusas porque lo que busca son resultados. Nuestros líderes empresariales necesitan un nivel de compromiso alto y suficiente para afrontar retos extraordinarios a los que nunca antes se han enfrentado. El nivel de confianza debe ser absoluto, como personas y profesionales deben conseguir una mentalidad fuerte y estable, apoyarse más que nunca en sus equipos, familia y amigos. Persistencia, fuerza del carácter, convencimiento, compromiso, determinación son algunas de las virtudes que los líderes deberán exhibir. En definitiva, este año nuestros líderes deberán mantener la fe intacta, la fe verdadera y no la fe ciega. La fe verdadera requiere que depositemos la confianza en nosotros mismos y en nuestras habilidades y que por tanto utilicemos nuestros conocimientos para asegurarnos de que avanzamos en la dirección correcta. La fe ciega es otra cosa, es limitarse a decirse que todo irá bien y esperar a que algo cambie, lo contrario al liderazgo que promulgó en este breve artículo.

En nuestra empresa hemos redactado hace ya años un decálogo, un manifiesto de cómo nosotros personalmente vemos la empresa y a su líder. Revisando este decálogo me he dado cuenta que es más actual que nunca y de su necesaria aplicación para este 2021. Se lo dejo aquí a todos los empresarios y líderes, que como ya escribí en un anterior artículo son también los grandes protagonistas en esta crisis y que nos guiaran hasta el final del túnel. A continuación los 10 sencillos puntos de nuestro decálogo:

1- Todo empieza por ti. Piensa cómo es tu función como líder.

2- Crea un reto compartido que guíe y planifique al equipo para conseguirlo.

3- Coloca siempre al cliente en el centro de tus acciones.

4- Cuida a los empleados de la misma forma que deseas que ellos cuiden de tus clientes.

5- Pon en marcha los procesos y herramientas que permitan disponer de la información que tu negocio necesita.

6- Ponte a prueba periódicamente entregando información, midiendo y analizando resultados.

7- Aprende a aprender, definiendo procesos e implantando herramientas y tecnologías que te faciliten el seguimiento.

8- Define la misión y visión de tu empresa. Transmite claramente los valores que te permitirán definir “el cómo” en el trabajo diario.

9- Descubre tus creencias, tanto poderosas como limitantes, y rodéate del personal interno y externo que te ayude a mejorar.

10- Define objetivos a largo plazo, busca la manera de posicionarte y de crear ventajas competitivas sostenibles en el tiempo.

Desde aquí animo a todos los empresarios y directivos de Baleares de que hagan el esfuerzo de ver el vaso medio lleno, a valorar lo que hacen cada día y por tanto los progresos diarios por pequeños que sean, a mantener una fe verdadera, la confianza en sus capacidades, a conseguir ejecutar las estrategias necesarias que se han propuesto este principio de año, todo desde un liderazgo auténtico, de propósito, con determinación y convencimiento. Sabemos que no será fácil, realmente nunca lo fue.