El ciclista ecuatoriano Richard Carapaz (INEOS Grenadiers) se ha adjudicado este jueves la duodécima etapa de La Vuelta a España, que ha recorrido 192,7 kilómetros entre Salobreña y el puerto de primera categoría de Peñas Blancas, en un día donde el maillot rojo sigue siendo Remco Evenepoel (Quick-Step Quick-Step Alpha Vinyl), que ha sufrido una caída. El artarenc Enric Mas sigue tercero en la general.
Carapaz ha aprovechado una multitudinaria fuga para conseguir una ventaja de casi diez minutos donde luego ha tenido que resolver contra corredores de mucho nivel como el neerlandés Wilco Kelderman (Bora Hansgrohe), que ha entrado segundo.
Ambos se reincorporan a la clasificación general, objetivo inicial de ambos. Entre los favoritos, Evenepoel no ha demostrado en la subida la misma facilidad que en otras ocasiones para ampliar sus diferencias, quizás mermado por la caída que ha sufridp lejos de la meta y que le provocó algunas magulladuras.
Los cinco primeros en la clasificación general han entrado prácticamente juntos por meta.
"NO MIRABA A REMCO, MIRABA A LOS OTROS"
El mallorquín Enric Mas (Movistar) afirmó que en los momentos decisivos de la etapa de la Vuelta de este jueves, con final en Peñas Blancas, "no miraba a (el líder) Remco (Evenepoel), miraba a los otros rivales" que tiene en la lucha, de momento, por el podio.
"Estamos en la duodécima etapa y con ese ataque quería ver la reacción y las piernas de todos. No miraba a Remco; miraba a los otros y a cómo era su reacción. Todos los que aguantaban en ese grupo son corredores que aspiran al podio y de todos hay que estar atento", dijo en meta.
"El tramo final era bastante duro, pensaba que sería más suave. Al final no hemos perdido tiempo", se congratuló sobre el desarrollo de una etapa en la que Evenepoel tiró en la parte final. "Nos tenemos que acostumbrar a esos arreones que pega al final. Es su forma de correr y por ahora le va muy bien", comentó sobre el poderío del belga, al que preguntó por la caída a 45 km de meta.
"Me lo he encontrado justo antes de hablar con vosotros y le he preguntado cómo había sido la caída. Me ha dicho que no tenía nada, que había patinado y nada más. Sabemos que es duro y no ha mostrado ninguna debilidad, aunque es verdad que el puerto tampoco tenía mucha complicación", explicó a los periodistas.
"Alguna conclusión he sacado de hoy, pero nos la quedamos para nosotros", comentó, sonriendo a los informadores e insistiendo en que sigue yendo "día a día", como viene «diciendo desde el principio» de la Vuelta. "Lo más importante: que seguimos disfrutando", destacó, superado el ecuador de la carrera.