Tras varios años como coach profesional, me he encontrado con muchos problemas existenciales, donde los clientes llegan a mi despacho sin ganas de seguir hacia delante y sin tener energía para hacerlo.
También ocurre que hay personas que llegan al despacho con el fin de que le demos una varita mágica, o píldoras fantásticas que hagan que sin su esfuerzo puedan salir hacia delante.
Pero las cosas no ocurren así, por mucho que, en internet, entre los libros y los videos de crecimiento personal, nos hagan ver que todo es sencillo y que se pueden conseguir las cosas con poco esfuerzo, esto es incierto.
Y es curioso que a día de hoy, todavía haya problemas para entender que la vida tiene unas reglas que hacen que, si tú las sigues las cosas fluyan, pero para ello tienes que conocerlas.
En mi próximo libro, que saldrá a la venta en el mes de junio, “La imagen de tu alma”, explico claramente, de una forma lúdica como puedes seguir y aprender estas normas y lo hago a través de historias reales, que he vivido en mi despacho, para ayudar a las personas que lean este libro.
En él encontrarás el camino para vivir una vida con sentido, encontrando tu tikún, que es el camino que debes de seguir en esta vida guiado por tu alma.
En este momento histórico, más que nunca, debes de buscar entre las herramientas que te ayudan en tu vida, porque son muchas las personas que las realizan y han conseguido grandes avances en sus vidas. Pero no esperes que sin esfuerzo vayas a conseguir mejorar tu vida.
Detrás de cada historia de éxito que conozco, siempre hay un camino de esfuerzo y sacrificio que, tras encontrar el secreto del éxito, ha sido suavizado, hasta el punto de fluir todo mágicamente.
Pero sentado en tu sofá, sin hacer nada para mejorar tu vida no lo vas a conseguir, sino todo lo contrario.
Solo tienes que creer en ti y esforzarte cada día por ser la mejor versión de ti mismo.
No obstante, soy consciente que es complicado hacerlo así y que son más las personas a las que la vida les pesa, que las contrarias.
Sin embargo, me gustaría que no perdieras la esperanza que seas consciente de que es posible conseguir un cambio en la vida. Ponte metas sencillas y comienza cada día realizando pequeños cambios en tu vida, no esperes que de un día a otro todo cambie porque no será así. Vive como si cada día tuvieras algo nuevo que descubrir y busca el secreto para hacerlo, que siempre está en tener claro tus objetivos y el para qué te levantas cada mañana.
Sin ese rumbo, la vida te parecerá más complicada, sería como llegar a un país nuevo sin un mapa o un GPS, ¿sería imposible verdad?, pues eso ocurre con nuestra vida, que pretendemos conseguir el éxito sin ese mapa y eso nos frustra y nos hace perder la esperanza.
Piensa que siempre volverá a amanecer y que mañana, seguro que la vida te puede volver a sorprender con un nuevo despertar.
