Su respuesta llega después de que el Club les diese este lunes un ultimatum sobre la remodelación. Exigen obras ya para una remodelación parcial. "No podemos aceptar esa solución, por fases no se puede hacer, ya que si pasa algo los que respondemos somos los propietarios", explica.
Desde Procampo les parece "una vergüenza" la propuesta que les presentó el Club hace once días: cesión mediante derecho de usufructo por un plazo de 60 años, y si el campo está en condiciones de competiciones deportivas, prorrogables otros 15 años, y que se resolverá si antes de finalizar este año no se ha procedido a la demolición del Estadi.
Además, se establece que los abonados deberán pagar el 50% de las entradas para ver cualquier partido "que contraviene lo establecido en nuestros Estatutos".
Y todo, con unos beneficios para los propietarios de tan solo un 50% de los ingresos de la publicidad. "Algo irrisorio si se tiene en cuenta lo que nos costarían las obras".
"Ahora les entran las prisas", dice "cuando siempre les hemos puestos muchísimas facilidades, a su medida". Por ello, cree que el comunicado es "una mentira a toda la afición".