Agentes de la Patrulla Verde de la Policía Local de Palma, con el apoyo de miembros de la Unidad Nocturna, paralizaron este pasado domingo un concierto al aire libre en Sa Possessió, ubicada en el polígono de Son Rossinyol. Según informa la Policía, el promotor del evento se enfrenta a una multa de hasta 300.000 euros.
Los policías se personaron en el lugar de los hechos a las 4 de la madrugada a causa de las numerosas llamadas de vecinos y usuarios de la zona que alertaban del ruido producido por esta actividad.
Al llegar al establecimiento los agentes efectuaron una medición perimetral que concluyó que el sonido superaba en 24 decibelios el nivel permitido por la legislación. Al pedir al promotor la licencia para ejercer la actividad al aire libre, éste dijo que no la tenía. Por ello, se paralizó inmediatamente el concierto y se desalojó a todos los asistentes.
Sa Possesión ha sido objeto de numerosas denuncias por ruidos por parte de vecinos de la zona, un hecho que ha motivado las actuaciones policiales. En concreto, durante los años 2018 y 2019 se han confeccionado siete informes sobre anomalías en el funcionamiento de la actividad y se han levantado ocho actas por incumplimiento de las condiciones de la licencia y por actividades musicales en el exterior.