La portavoz parlamentaria del PP, Margalida Prohens, interpeló este martes en la sesión parlamentaria de control al Govern, a la presidenta Francina Armengol, sobre el viaje del vicepresidente Biel Barceló a la República Dominicana. Además los ‘populares’ quieren conocer todos los viajes efectuados por Barceló y lo que costaron a las arcas públicas. En varias fotografías publicadas en diversas redes sociales, se puede ver a Barceló en Punta Cana en lo que a todas luces parece un acto privado, por lo que no se informó de ello ni fue incluido en la agenda del vicepresidente del Ejecutivo.
Que el PP interpele a Armengol por este asunto, sin antes tener datos ni constancia alguna de que el coste del viaje de Barceló no haya corrido a su costa, parece un ejercicio de oposición cuando menos imprudente. Como también puede considerarse así criticar al Govern porque un autobús de servicio público interurbano se incendie entre Campos y la Colònia de Sant Jordi. La oposición parlamentaria no debiera depender de hechos fortuitos o de fotos que son publicadas en Instagram, sino de un ejercicio más riguroso de análisis de los problemas de la ciudadanía y de las acciones y estrategias del Govern para resolverlos. A no ser que se quiera trasladar una imagen de superficialidad y frivolidad.
Nadie podrá cuestionar el derecho que tenga Biel Barceló de tomarse unos días de descanso en el lugar que le parezca más conveniente. Y si acaso se pueda lanzar algún reproche, debería ser por la importancia del pleno del Parlament del que estuvo ausente, donde se aprobaron importantes leyes de gran interés para la ciudadanía y para su Govern, argumentos que inexplicablemente no utilizó el principal grupo de la oposición.
