La Obra Cultural Balear se ha sumado a sus equivalentes en Cataluña (Òmnium Cultural) y Valencia (Acció Cultural del País Valencià) patra elegir al encarcelado Jordi Cuixart como presidente de la Federació Llull, la entidad que integra a las tras organizaciones. Cuixart, presidente de Òmnium Cultural, se encuentra en prisión desde el pasado mes de octubre acusado de un delito de sedición.
Las “tres principales entidades culturales de los Países Catalanes”, han nombrado a Jordi Cuixart como presidente de la Federación Llull, que toma el relevo de Joan Francesc Mira. En un comunicado aseguran que “con esta elección, las tres entidades quieren denunciar el encarcelamiento del presidente de una entidad cultural; un caso único en la Unión Europea”. Han escenificado el nombramiento a las puerta de la prisión de Lledoners. Allí han exigido la libertad de los “presos políticos y exiliados” y “el fin de la represión política contra derechos y libertades fundamentales”.
Las tres entidades han acordado las principales líneas de actuación de la federación que pasan por cuatro puntos: denunciar “el juicio político contra el soberanismo”; la defensa de los derechos y las libertades democráticas; la proyección de la lengua catalana; y garantizar la reciprocidad de las emisiones de las diferentes televisiones públicas. Han insistido en actuaciones en las que se involucren los niños como premios literarios y marchas multitudinarias.
