El presidente de la formación, Tolo Gili, ha criticado que en unos años de incrementos de los recursos “vía aumento de recaudación tributaria, fondos europeos y ayudas covid, el Gobierno no haya reducido el endeudamiento y que tenga que pedir un crédito de 1.200 millones de euros demuestra una gestión financiera poco rigurosa y negligente”.
Asimismo, Gili ha indicado que en unos años de incremento de los recursos de Baleares, uno de los objetivos del ejecutivo tendría que haber sido reducir la carga de la deuda y de este modo “romper el círculo vicioso consistente al endeudarse sistemáticamente para pagar la deuda”.
La formación también pide que se condene la deuda acumulada por la infrafinanciación que se calcula que es el 60 por ciento de la deuda de la comunidad, y que se tengan en cuenta los gastos financieros generados por la infradotación de las competencias de salud y educación que sufren una deuda histórica.
De esta manera, Gili ha reclamado un nuevo modelo de financiación autonómica que avance “hacia el concierto económico y que recoja el principio de ordinalidad, así como, un régimen especial tanto económico como fiscal con cara y ojos con un factor de insularidad dotado como mínimo de 400 millones de euros anuales y la eliminación de la regla de minimis”.
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