La libertad de Bárcenas no compra su silencio
jueves 22 de enero de 2015, 19:23h
No son pocos quienes con una sobreactuación notable sostenían que la libertad condicional concedida por la Audiencia Nacional a Luis Bárcenas (previo pago de una fianza de 200.000 euros) obedecía a una intención del Gobierno de Mariano Rajoy de comprar su silencio. El ex tesorero del Partido Popular demostró en su comparecencia por videoconferencia en la Comisión de Investigación de Son Espases que continua defendiendo la versión ofrecida ante el juez Pablo Ruz y se responsabilizó sin ambages de llevar la contabilidad B del Partido Popular, descargando sobre Álvaro Lapuerta la responsabilidad de la contabilidad oficial y de las donaciones que se recibían.
En una comparecencia que despertó una inusitada expectación en el Parlament, Bárcenas negó toda relación entre las donaciones recibidas por el PP y la adjudicación de obra pública, cosa que ratifica los informes que la Policía Judicial ya ha emitido al respecto. Además, exoneró a Jaume Matas de cobrar a cambio de adjudicar nada. Será difícil demostrar lo contrario, incluso por la Fiscalía que sigue sin judicializar el caso. Aún más por una Comisión Parlamentaria.
Pero quedó claro que Bárcenas defiende su versión y no calla, como algunos creían que haría tras la imposición de una fianza de 200.000 euros para lograr poner fin a la prisión preventiva que soporta hace ya 19 meses. Nada de eso. Continúa defendiendo la existencia de una contabilidad B en el partido y la desvincula del dinero descubierto en Suiza, que refuta suyo y reta al PP a querellarse contra él si considera que lo ha distraído de los fondos de la formación conservadora.
Bárcenas pudo, como hicieron Aina Castillo y Sergio Beltrán, eludir contestar a las preguntas que se le hicieron, amparándose en el consejo de sus abogados y en su derecho a defensa. Pero no lo hizo, contestó a todo directamente y sin circunloquios, lo que evidencia su afán de locuacidad y que no considera que su puesta en libertad bajo fianza sea como contraprestación a su silencio.
En todo caso, Bárcenas no aportó nada al objetivo de la Comisión de investigación. Nada sabe del Hospital de Son Espases y nada pudo esclarecer sobre eso. Pero él mismo se encargó de escampar una sombra de duda sobre la financiación de los partidos políticos y sus campañas electorales. Algo que intranquiliza a la ciudadanía y requiere de medidas concretas para evitar la corrupción.