Sólo 53 de los 605 opositores que se presentaron a este primer exámen, tipo test, al Cuerpo Superior de la comunidad han aprobado provisionalmente esta primera prueba, lo que ha provocado un fuerte malestar, tanto para los sindicatos como para los propios examinados.
Desde el STEI se sienten decepcionados con el modelo de prueba y critican que "no es el modelo ideal ya que una oposición pura y dura no permite puntuar para conseguir méritos a diferencia de un modelo de concurso - oposición, que es el ideal en nuestra opinión", asegura el secretario general del STEI, Miquel Gelabert.
Gelabert indica que "es el Tribunal el que marca el nivel, pero creemos que ésto dejará desatendida a la Administración, ya que estos datos de aprobados no permitirá ni siquiera la creación de un bolsín para cubrir futuras vacantes".
Así, los pocos que han superado este primer test deberán enfrentarse a otras dos pruebas más, que también los podría dejar fuera.