El estudio, realizado por las doctoras María Antonia García Sastre y Margarita Alemany, titulares de Economía de la Empresa de la Universitat de les Illes Balears (UIB), toma como base los datos obtenidos durante los ocho días de la prueba -los seis de competición y los ocho previos-. Ello significa que Copa del Rey aporta diariamente 2,2 millones de euros a la economía local.
Por segmentos, el sector que obtiene mejóres réditos de esta actividad es el del alojamiento turístico, con un total de 4.621.925 euros. Le sigue el gasto realizado en restaurantes, supermercados y otros proveedores de comida, que alcanzaron los 3.348.491 euros de facturación de clientes directamente relacionados con la regata, y las compañías aéreas y marítimas, que sumaron 2.626.346 euros. Taxis, autobuses y empresas de alquiler de vehículos alcanzaron los 676.435 euros, mientras que los asistentes a la regata, ya sea como participantes, invitados o como periodistas, gastaron 829.689 euros en ocio, 735.920 en equipamiento deportivo y 743.936 en compras y regalos, entre otros.
1.500 REGATISTAS
La 38 edición de la Copa del Rey Mapfre de Vela reúne a más de 1.500 regatistas a bordo de 132 barcos de 26 países. Todos ellos aspiran a uno de los once títulos en juego, correspondientes a otras tantas clases, en las diferentes pruebas que se celebran a partir de este lunes y hasta el sábado en el campo de regatas de la Bahía de Palma.
La prueba está organizada por el Real Club Náutico de Palma y la Real Federación Española de Vela, con el patrocinio de Mapfre y la colaboración institucional del Govern de les Illes Balears, el Ayuntamiento de Palma, la Autoritat Portuaria de Balears y la Federación Balear de Vela.