Según el escrito del Ministerio Fiscal, la víctima aprovechó para huir cuando el acusado se dirigió a su vehículo en un momento dado.
Los hechos tuvieron lugar en el este de Mallorca y son constitutivos de un delito de agresión sexual continuado. El agresor se enfrenta a una pena de 10 años de cárcel y deberá indemnizar a la víctima con una cantidad de 6.000 euros.