El acusado de violar a una chica que conoció por Tinder niega los hechos

El encausado, un hombre de 31 años de origen marroquí, ha asegurado durante el interrogatorio que “nunca” se ha dado de alta en esta aplicación y ha negado haber mantenido relaciones sexuales con chicas con las que haya contactado a través Tinder o Facebook

El hombre, que cumple condena en prisión por violar a una joven de 19 años que conoció por otra aplicación móvil bajo un perfil falso, ha manifestado que “para nada” ha usado fotos íntimas de la denunciante para coaccionarla tras la presunta violación..

A preguntas del fiscal, el encausado ha contestado que no le suena “de nada” el nombre de la chica, que los hechos de los que le acusan son “falsos” y que no la obligó en abril de 2015 a hacerle una felación, tal como denunció la chica en 2018.

La mujer denunciante, que ha declarado por videconferencia, ha contado que estuvo unas semanas hablando a través de Tinder con el acusado, quien mostraba la imagen de un chico joven, alto, moreno, con tatuajes y musculado. Como le gustaba, intercambiaron sus números de teléfono.

El día de la cita, el acusado acudió al domicilio de la denunciante. Tras abrir la puerta, ella comprobó que se trataba de un hombre cuyo perfil no era como el de Tinder y Facebook, por lo que cerró la puerta y llamó al joven con el que ella creía que había estado hablando.

El encausado le dijo que quien se había presentado era un amigo suyo que iba a comprobar que le recibiría con el antifaz y en ropa interior, tal como habían acordado. Le pidió que mantuviera relaciones sexuales con la persona que acababa de subir a su casa e incluso le llegó a ofrecer dinero y droga si aceptaba la propuesta.

La joven se negó a ello y el chico con el que había estado en contacto le dijo que iba a subir a su piso, y ella creyó que esta vez sí sería el joven que había conocido por Tinder.

Ha rememorado que le abrió la puerta de su casa, que no tenía mirilla, y que el acusado la empujó con fuerza hacia el interior del estudio, la tiró sobre la cama y que la amenazó con que iba a hacer con ella lo que quisiera.

Según su versión, pese a su negativa, la obligó a practicarle sexo oral. Por la presunta violación, ha reconocido que se sintió “destrozada”: “Estaba llorando porque no me creía lo que me acababa de suceder”.

Entre sollozos, la joven denunciante ha reconocido al hombre sentado este lunes en el banquillo de los acusados como el responsable de la violación que sufrió en su estudio de Palma.

Tras lo sucedido, el hombre intentó contactar con ella a través de otras plataformas, pero ella le bloqueaba cuando reconocía la imagen del perfil. Él continuó enviando mensajes para amenazarla con difundir sus fotografías en ropa interior, por lo que la Fiscalía solicita un año y medio de prisión por el delito de coacciones.

A raíz de la presunta violación, la joven precisó atención psicológica y psíquica a causa de los episodios de ansiedad y depresión derivados de la supuesta agresión sexual.

Además de la pena de prisión y el pago de la indemnización, la acusación pública también solicita la prohibición de aproximación a la víctima a menos de 500 metros durante 10 años.