Jaume Matas se resigna

Mientras su abogada va de recurso en recurso, Jaume Matas parece resignarse a su destino. mallorcadiario.com ha podido saber de su entorno más próximo, más íntimo, qué inquietudes tiene y qué cuestiones interesan al expresident que por ahora sólo va a la prisión de Segovia para dormir gracias a un tercer grado penitenciario al que le pueden quedar días.

El Juez de vigilancia Penitenciaria podría hacer firme esta misma semana el auto que revocaba el tercer grado a Matas, una decisión que devolvería al expresident a la reclusión en la cárcel segoviana a pesar de que ya ha cumplido un tercio de su condena de nueve meses. Matas ha recurrido aquél auto pero no parece muy convencido de poder mantener el actual tercer grado. En algún momento, valora la posibilidad de que la presión social por casos de corrupción como la "Operación Púnica" haya calado en el fiscal y el juez que tienen en sus manos que pueda seguir disfrutando del tercer grado.

mallorcadiario.com ha sabido por qué personas -familia aparte- pregunta Jaume Matas cuando tiene contacto con "su gente" de la isla. Matas se interesa por la situación de Maria Antònia Munar y la del periodista Antonio Alemany, ambos encarcelados en Palma. El último de ellos fue condenado en el mismo juicio que ahora tiene a Matas cumpliendo condena. Parece sentir empatía por sus situaciones.

También está preocupado por el futuro político en Balears. Se lamenta de que nadie en la actualidad se está preocupando de "hacer país", visto que el PP de José Ramón Bauzá no ha priorizado esta cuestión. El entorno de Matas destila que al expresident no le desagradaría que el Pi obtuviera un buen resultado electoral para vertebrar una política más próxima a los valores propios del archipiélago. Matas está atemorizado ante la posibilidad de que Podemos alcance las más altas cotas de poder.

Pero Jaume Matas tiene otra preocupación, si cabe, mayor que la reclusión. A pesar de que en apariencia su aspecto es muy bueno, el próximo 11 de diciembre será sometido a una intervención quirúrgica que debería empezar a paliar la grave infección de oído que padece. Se le va a extirpar el oído medio, y con él, la infección. Más adelante -en unos dos meses- se le reimplantaría un sistema equivalente pero artificial.

Y es que Jaume Matas está literalmente sordo. Se comunica con sus interlocutores colocándose un amplificador en el oído y entregándole a quien habla un minimicrófono direccional que manda la señal al aparato que él se inserta en el oído. En unas dos semanas se operará en Madrid "Esté en segundo o en tercer grado".

Su familia y su abogada le tienen prohibido conceder entrevistas y realizar declaraciones. Sin embargo, aún retruenan las que realizó hace unos diez días a la salida de la cárcel ante las cámaras. Eran las de Telecinco, pero también estaban las de laSexta.

Matas jura y perjura que las declaraciones fueron robadas y obtenidas con cámara oculta. Que él acdcedió a responder a los periodistas por deferencia pero que prohibió que se grabara la conversación. No se le hizo caso. Lo ha consultado con su abogada y finalmente no habrá denuncia contra Telecinco. No será por falta de ganas, dice el entorno de Matas.