La Guardia Civil ha intervenido más de 1.600 artículos falsos de reconocidas marcas de lujo en el mercadillo de Santanyí y varias tiendas de Cala Egos en el marco de la “Operación Low Cost”.
En relación con estos hechos, la Benemérita investiga a una docena de personas, de origen senegalés y chino, a los que se considera autores de un delito contra la propiedad industrial.
Así mismo, los agentes han instruido varias actas, por haber constatado 18 infracciones administrativas por irregularidades sobre protección de consumidores.
Los productos falsificados han sido retirados del mercado y la Guardia Civil ha querido recordar que además de ser un fraude “hubiese supuesto un riesgo para la salud de consumidores y unos perjuicios considerables para las marcas afectadas”.
En la operación se ha contado con la ayuda de tres peritos especializados en las marcas afectadas que se habían trasladado desde la península a la isla expresamente para este operativo. Estos expertos han valorado la cantidad del género aprehendido en más de 150.000 euros.
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