El descenso de la natalidad, el envejecimiento de la población y el invierno demográfico son asuntos que se han estado poniendo sobre la mesa desde hace décadas en Europa. Aprovechando la celebración del Dia Internacional de la Familia este domingo, el Foro Familia IB ha aprovechado para recordar las "graves consecuencias económicas que tandrá el descenso de la tasa de natalidad".
Según apunta el presidente de la entidad, Agustín Buades, existe un informe del Instituto Nacional de Estadística (INE) que sostiene que en 2029 en Balears habrá 10.000 niños menores de 10 años y 49.000 mayores de 65.
Ante este panorama, Buades considera que "incentivar la natalidad no es una cuestión moral sino económica", ya que sin un aumento de la población joven "será imposible sostener la estructura del estado del bienestar". Una manera de fortalecer estos aspectos serían, subralla Buades, "el incremento de políticas de ayuda a la familia" así como "someter las leyes que se aprueben a una perspectiva de impacto familiar de la misma forma que pasan por un estudio sobre el impacto de género o económico".
En este sentido, Buades critica la derogación de la ley de protección a la materindad que tuvo lugar hace unos meses en Balears: "Entendemos que había otras maneras de actuar, como por ejemplo la modificación parcial en lugar de la supressión íntegra".