Tuve la suerte y por eso estoy agradecido con la vida, de compartir muchos tiempos, momentos y experiencias con mi amigo Joan. Hace más de largos veinte años que decidimos ser amigos. Ya saben que la amistad no existe, solo existen los amigos y es más difícil querer a las personas que a la ideología. Nos tratábamos mucho, (aunque a ahora me parece que fue poco) y siempre existió ese cóctel que es imprescindible para cuidar la amistad: respeto, reciprocidad, accesibilidad y disponibilidad. Nunca, nuestra amistad tuvo que ir a urgencias ni necesito cuidados paliativos, a pesar de algún encontronazo y desencuentro. No existe la amistad eterna sino la amistad cuidada. Era un auténtico personaje que exprimió la vida hasta el último suspiro. Vivió con pasión y fue un auténtico apasionado de todo lo que hacía. Ante su terrible enfermedad su resiliencia fue mayúscula. Mantuvo su ánimo, sabiendo que los dados estaban ya tirados, pero siguió jugando porque como él decía “yo no me entierro mientras respire, ya me enterraran otros”. Su creatividad fue poliédrica y polifacética y fue un referente en el mundo sanitario balear, valenciano y aragonés.
El nombre de su proyecto, Salut y Força, lo dice todo. Supo rodearse de magníficos profesionales y siempre contó con la lealtad y el compromiso de fieles colaboradores, entre los que tengo el honor de encontrarme.
Joan ha sido la persona que mas sabia del mundo sanitario y tenia más contactos que el rey emérito. Era un maestro en gestionar la tolerancia, que saben que es poner armonía en las diferencias. Con su muerte, se va el hombre que más secretos conocía de entorno sanitario. Como él decía Salut y Forca vale más por lo que calla que por lo que dice.
Me acompaño con mojones que desfilan por mi memoria, las múltiples entrevistas que me hizo en radio, televisión y en el periódico. Todo lo que me ayudó en mi vida profesional. Joan decía tu eres el psiquiatra de Salut y Forca y así fue, mientras vivió.
Con la muerte se acaba la biografía pero el tren de la vida sigue. Por eso su legado seguirá. Así lo quería él y así lo dispuso. Su mujer Beda y su equipo de colaboradores cogerán su testigo y el mejor testimonio hacia Joan, será que el proyecto que nació hace mas de 22 años, persista.
Ahora, para elaborar el duelo, (donde no cabe atajos), me acompaño mucho con las reflexiones del gran Facundo Cabral, que sostiene que la muerte no puede parasitar nuestra vida .
"La vida no te quita cosas: te libera de cosas… te alivia para que vueles más alto, para que alcances la plenitud. De la cuna a la tumba es una escuela; por eso, lo que llamas problemas, son lecciones. No perdiste a nadie: El que murió, simplemente se nos adelantó, porque para allá vamos todos. Además, lo mejor de él, el amor, sigue en tu corazón.
No hay muerte… hay mudanza.
Joan allí donde estes, seguro que la armaras.
Mi memoria y mi agradecimiento amic.
Ya saben en derrota transitoria pero nunca en doma.