Los responsables del Ens Públic de Radiotelevisió de les Illes Balears y especialmente los directivos de IB3 Televisió, se han esforzado por ofrecer a los espectadores, en la recta final de la legislatura, un buen número de programas donde la corrupción política y ciertos casos judiciales de trascendencia mediática, son el tema central.
El canal autonómico ha emitido recientemente una serie de ficción (Sicília sense morts), una docuserie de seis capítulos (El Rei. Joan Carles I, mitja vida a Marivent), una docuserie de cuatro capítulos (Munar. Poder, corrupció, presó), y cuatro documentales (Josep Cardona: capses de Colacao enterrades; Vicenç El Grande: el joc del negoci; Gabriel Cañellas: el túnel més perillós; y Francisco Lavao: vida i mort del fundador del SYP). Un intenso trabajo de espléndida factura, encargado en muchas ocasiones a la productora MOM WORKS.
Hay que felicitar, por tanto, al Ente Público que dirige Andreu Manresa, por esta ingente labor periodística e historiográfica, para dar a conocer los episodios de corrupción política más sonados de nuestra historia moderna menos reciente.
Sin embargo, y por animar a los jefes de IB3 a dar un paso más y no quedarse únicamente en la labor histórico-divulgativa, atreviéndose a explorar el pantanoso terreno de la investigación periodística, sería muy bueno que se dedicasen recursos a casos de corrupción poco conocidos e insuficientemente investigados, como por ejemplo el caso ‘Eivissa Crea’, que llevó a la Policía Judicial a intervenir documentación en el Ajuntament d’Eivissa en abril de 2018, y que afecta a destacados socialistas ibicencos.
O también el más reciente caso ‘Puertos’, que afecta a la Autoritat Portuària de Balears (APB) y que llevó al registro de las sedes del organismo público que gestiona los principales puertos del archipiélago, con la detención de su entonces presidente, además de otros directivos sospechosos de corrupción. Es cierto que el asunto aún se está investigando por parte de un juzgado de instrucción de Palma y que buena parte de las pesquisas siguen declaradas secretas, pero el interés periodístico del asunto es innegable. Incluso la propia presidenta del Govern, Francina Armengol, resultó señalada en un informe de los investigadores, ya que el presidente de la APB, Juan Gual, la mantenía informada de las vicisitudes que se iban sucediendo en relación al Club Náutico Ibiza. El caso ‘Puertos’, además, tiene ramificaciones en todas las Baleares y hay expolíticos que están bajo la lupa de los investigadores, como el exconseller socialista Josep Maria Costa, hermano de la actual portavoz del Grupo Socialista en el Parlament, Pilar Costa.
Tampoco sería mala idea informar con el detalle acostumbrado por IB3 en los últimos meses sobre casos que pronto deberán ser juzgados, como el caso ‘Multimedia’, que sentará en el banquillo al exsenador socialista Antonio Manchado, o a Paco Cano, destacado militante socialista y padre de la portavoz adjunta del PSIB, Silvia Cano.
De hecho, sería estupendo que la televisión pública se atreviese a investigar lo sucedido en el Ajuntament de Palma con la empresa de notificación de multas, CI Postal, cuatro de cuyos empleados fueron detenidos por la Policía al existir sospechas de que no entregaban las cartas y falsificaban las firmas de los destinatarios, lo que ha causado graves perjuicios a los afectados. La defensa que el concejal de Podemos y portavoz del equipo de gobierno municipal, Alberto Jarabo, ha hecho de la citada empresa, pese al hallazgo de notificaciones en la basura, sumado a que CI Postal sigue trabajando para Cort, hace que este asunto adquiera enorme interés para la opinión pública.
Y también despertaría el interés de los telespectadores el caso de moda, que tras el fiasco en el juicio del caso ‘Cursach’, ya podemos bautizar como caso ‘Penalva y Subirán’. Hay tanto que investigar en este asunto que se requeriría una docuserie con bastantes capítulos. Las actuaciones del exjuez y del exfiscal, junto a los agentes del grupo de blanqueo de la Policía, durante la instrucción del caso ‘Cursach’ son de rabiosa actualidad ahora mismo. Y sería estupendo llegar a averiguar lo que el Ajuntament de Palma y el Ajuntament de Calvià fueron obligados a hacer contra los establecimientos de Cursach. Por no hablar que se podría entrevistar a las docenas de investigados que fueron enviados a prisión preventiva sin pruebas, supuestamente. Ahí tiene IB3 un filón, si quisieran ampliar el abanico de sus investigaciones.
Pero con toda seguridad, el caso que más expectación levantaría sería el de la visita de la presidenta Armengol al Hat Bar, en la madrugada del 7 de octubre de 2020, cuando había restricciones impuestas por el propio Govern a la actividad de los bares y restaurantes. Son tantas las incógnitas de aquel triste episodio, que los profesionales de IB3 TV se lucirían esclareciendo lo que sucedió realmente aquella noche.
Como se ve, hay multitud de casos en los que la televisión pública puede arrojar luz. Episodios recientes y vivos, sobre los que poco se sabe todavía. Si prefieren seguir centrados en el pasado, con episodios ya juzgados y con condenas judiciales firmes, parecerá que los ímprobos esfuerzos hechos y los copiosos recursos económicos destinados a contar capítulos lamentables de nuestra historia, persiguen una finalidad no declarada pero fácilmente adivinable: seguir sacando rédito electoral de aquellos casos de corrupción, protagonizados siempre por políticos de partidos que no son los que ahora gobiernan en las principales instituciones de Balears.
Se alimenta así la teoría de que poniendo los focos y el objetivo de las cámaras de IB3 en el pasado lejano, se evita hablar del pasado más próximo y del presente, con un objetivo político y electoral.
Yo no creo que eso sea lo que está sucediendo, pero es natural que haya gente que lo piense. Por eso sería de agradecer que IB3 demuestre su neutralidad y su vocación de servicio público, investigando casos que afectan a quien ahora gobierna y no a quien gobernó hace décadas.
Tranquilos, que no les cobraré nada por todas las ideas que les he dado para que IB3 TV pueda lucirse con unos cuantos reportajes de investigación que a buen seguro conseguirán aún mejores datos de audiencia que los emitidos hasta ahora. ¡Prueben!