Ha pasado ya casi una semana desde el atentado de las Rambles de Barcelona, para el que no entienda catalán son las Ramblas de Barcelona. Una desgracia así hace 20 años nos hubiese unido a todos pero en plena época de redes sociales lo que han conseguido los terroristas es sacar lo peor de nosotros, enfrentarnos los unos a los otros y sacar a la luz que no somos tan civilizados como presumimos.
Antiguamente cuando ocurría algo tan brutal se hablaba cara a cara en los bares, en el trabajo o en la calle y más o menos uno opinaba libremente y ahí quedaba eso. Hoy la gente vomita sus opiniones en Facebook o Twitter sin pensar que esa opinión la va a ver mucha más gente que en una tertulia de amiguetes y lo que es peor, va a quedar para la posteridad y aunque rectifiques va a ser muy difícil borrar cualquier rastro así que cuidadito con equivocarse porque vas a cargar con esa cruz por los siglos de los siglos y si no que se lo pregunten a mi amiga Violeta y su foto con José Ramón Bauzá.
De repente en vez de solidarizarse con las víctimas muchas personas sacaron a relucir su catalanofobia más repugnante y en vez de preocuparse por el contenido de los mensajes emitidos por los políticos catalanes y los mossos de esquadra se han preocupado ante todo por el continente que en este caso era la lengua...catalana. Con el argumento de que el español es la lengua de todos los haters han conseguido dar alas a los independentistas y es que lógicamente muchos catalanes se han sentido atacados cuando deberían haber sentido el apoyo y cariño de todos los españoles más preocupados en debates estériles y en excretar su bilis más ácida envuelta en el españolismo más rancio posible. Los mismos que en su momento lapidaron a Pilar Manjón tras el 11-M aprovechan ahora para insultar a Ada Colau o quien se les ponga por delante porque odiar está en su naturaleza como le pasaba al cocodrilo que se comió a la rana del cuento.
Pero como era de esperar y es que los haters son muy unineuronales y previsibles la peor parte se la ha llevado la comunidad islámica española que por más que se ha disculpado por algo que no habían hecho han recibido insultos, amenazas e incluso agresiones porque los terroristas eran yihadistas de Daesh y como antes eran todos los vascos terroristas ahora todos los moros son asesinos, quieren violar a vuestras hijas e imponer su religión a sangre y fuego . ¿Os imagináis que cada vez que una mujer muere a manos de su pareja todos los hombres tuviésemos que salir a disculparnos y flagelarnos por algo de lo que tenemos responsabilidad cero? ¿Ridículo verdad? Pues ahí lo dejo. En Internet gente supuestamente decente e inteligente ha colgado enlaces de webs fascistas de ultraderecha atacando a todo lo que huela a Islam sin importarle que aquello fuese un insulto a la convivencia y a la inteligencia. Los terroristas no han conseguido ni conseguirán cambiar nuestro modo de vida pero podrán colgarse la medalla de haber sembrado la semilla del odio entre nosotros.
Y como guinda el ex ministro y eurodiputado Mayor Oreja ha declarado en una entrevista que la debilidad de Occidente es por culpa de entre otras cosas del Matrimonio Igualitario.