"Esta celebración está presidida por el mito del amor romántico que limita el amor a una sola forma de querer, a menudo alejada de la vida real, y lo circunscribe al ámbito de la pareja", ha asegurado la directora insular de Igualdad, Nina Parrón. Para la asociación, en cambio, estos actos suponen un atentado contra los artículos 5 y 6 de la Ley Orgánica 1/1996, de 15 de enero, de Protección Jurídica del Menor, de modificación parcial del Código Civil y de la Ley de Enjuiciamiento Civil.
"Al querer imponer una ideología de género a todos los ciudadanos incluido los menores y sin consentimiento paterno, desterrando el amor romántico o enamoramiento como una nueva forma de explotación. El deseo de imponer y dirigir cualquier aspecto de la persona y menos de los menores por parte de una administración vulnera en lo más básico nuestro ordenamiento jurídico", argumenta la asociación.
"Calificar como mito el amor romántico alejado de la vida real y circunscrito a la pareja es intentar imponer, sin respetar la libertad de las personas , una única forma de relación donde se destierra la afectividad manteniéndolo sólo en la genitalidad lo que vulnera directamente el artículo 6 que defiende la libertad de ideología y de conciencia", prosiguen.