La Fiscal General del Estado, Dolores Delgado, ha emitido este viernes un decreto de emergencia, relacionado con la actual crisis sanitaria del coronavirus y destinado a "asegurar el cumplimiento del servicio público y de las funciones constitucionales del Ministerio Fiscal, así como la salud de los componentes de la carrera fiscal y de la ciudadanía". No obstante, tal como se expresa también en el documento, las instrucciones contenidas en el mismo son susceptibles de ser modificadas en función de la evolución de la infección, al hilo de las recomendaciones que comuniquen los responsables sanitarios.
Entre las medidas que menciona la fiscal general en su escrito, y que se aplicarán de forma coordinada con el Ministerio de Justicia, los tribunales y las comunidades autónomas, cabe destacar la potenciación del teletrabajo para evitar una excesiva presencia de personas en los emplazamientos laborales. Dentro de este ámbito, el texto sitúa no únicamente aquellas tareas que se pueden desarrollar por vía telemática, sino también aquellas gestiones vinculadas a despachos de carácter ordinario, y que también puedan llevarse a cabo desde el domicilio particular.
Al mismo tiempo, Dolores Delgado incide en la necesidad de garantizar los servicios básicos y los turnos de guardia del Ministerio Fiscal, cuyos representantes, en aplicación del decreto, deberán asistir a las vistas, comparecencias y juicios que se hayan programado.
Al mismo tiempo, la Fiscalía General ha suspendido por el momento las visitas de los fiscales a residencias de tercera edad, centros de usuarios con discapacidad, recintos penitenciarios, equipamientos para el internamiento de ciudadanos extranjeros, centros de protección de menores, y todos aquellos emplazamientos que impliquen un incremento del riesgo de contagio.
El decreto entrará en vigor el próximo miércoles y su contenido será comunicado a las instancias competentes, entre ellas el Consejo del Poder Judicial.