Fantasmas tras los visillos

Cuando se acabe esta vorágine de don Quijotes, Robines Hood, Batmans, Supermans y demás especies que se han puesto de moda, llegará la Era política de la auténtica oscuridad.

Los fantasmas, ahora apostados tras los visillos, con sus ojos de Golum y el mal de la ambición metido en el alma, saben esperar. Ellos, a diferencia de los de ahora, no entienden de batallas quijotescas contra molinos de viento, no entienden de quimeras para perseguir un sueño, ni abanderan la palabra honestidad, por fin, tras años de ansiarla.

Ellos son de otra especie mucho más peligrosa que la de los que ahora cambian de Partido, amanecen en otros en pos de sueños, y se deciden dar voz a lo que callaban.

Los fantasmas, esperan pacientemente incluso a que los suyos fracasen porque saben que su fracaso será su éxito dentro de unos años, cuando acabe la siguiente legislatura, la que estamos a punto de votar desde todos los frentes. Los fantasmas son pacientes porque, es tanto su engreimiento, que se creen inmortales.

Por ese y otros motivos me preocupa más lo que ocurrirá en política a partir del 2019, cuando se hayan auto sacrificado los valientes, los audaces, temerarios, kamikazes, locos, perdedores, soñadores…cuando hayan sacrificado a los audaces, buenos gestores pero buenas personas, a los que concilian dignidad y política, a los que no callan casi nunca…

Será entonces, cuando apartaran los visillos y reaparecerán, como salvadores de la Patria o de Patrias diversas, aquellos que habrán sido capaces de ver morir en la arena de la confrontación política a amigos y enemigos, sin pestañear, sin capacidad para la empatía.

Estos si son peligrosos, estos si son CASTA. Los profesionales de cómo conseguir sobrevivir de tapadillo a cambio de revivir de vez en cuando y conseguir un cargo, dónde sea, y de lo que sea, alguna que otra legislatura. Cuidado con esos….