Así, ha explicado Garlick, 1,2 millones de esos vídeos fueron bloqueados a la hora de ser subidos “por respeto a las personas afectadas por la tragedia y las preocupaciones de las autoridades locales, también eliminamos todas las versiones editadas del vídeo”.
Las imágenes recogían momentos de los dos ataques que se produjeron contra sendas mezquitas de Christchurch, la mayor isla Sur de Nueva Zelanda y que se saldaron con medio centenar de muertos y once heridos de gravedad.
El atacante, portando un arma automática y varios cargadores y vestido con ropa militar, irrumpió en la mezquita Al Noor de la citada localidad y abrió fuego contra los cerca de trescientos fieles allí reunidos.
Más tarde, el ataque se reprodujo en la mezquita de Linwood, en la misma ciudad.
La primera ministra neozelandesa calificó el ataque de “terrorista” y como “uno de los días más oscuros de nueva Zelanda”.