En este contexto, reclamó la extensión preferencial de los ERTE hasta alrededor de la Semana Santa del año que viene y con las mayores bonificaciones posibles "para atender a las necesidades, la precariedad y la catástrofe por la que está atravesando y va a seguir atravesando el sector turístico español"
Zoreda aseguró que, ante una situación en la que el turismo está atravesando la encrucijada más compleja probablemente desde la última guerra, se requiere un "plan de rescate" inmediato en el cual los ERTE necesitan una extensión preferencial en sus condiciones para un sector que genera mucho empleo y mucha actividad inducida en España.
CAÍDAS EN CASCADA.
Zoreda explicó que el sector turístico está afectado por dos elementos claves de las restricciones como son la falta de movilidad y la agrupación de personas. Ante esta circunstancia sobrevenida se hace imprescindible la atención preferente en la que los expedientes de regulación de empleo son solo el primer paso "para no tener caídas en cascada".
En su opinión, durante esta pandemia el turismo ha sido un sector muy agraviado por lo que requiere una atención muy específica. En este punto recordó que el sector turístico podría perder este año más de 98.000 millones de euros de actividad y que casi 800.000 empleos están en juego.
Por todo ello, sin deslegitimar las aspiraciones de ayudas de otros sectores económicos, reclamó una "mirada especial" para un sector que si no es ayudado puede caer en "pérdidas de empleo galopantes" durante los próximos dos meses.