www.mallorcadiario.com

Es Navidad, gracias a Dios

domingo 22 de diciembre de 2024, 04:00h

Escucha la noticia

Me gusta la Navidad. Sobre todo la música, el Belén y las reuniones familiares. Tal vez, por eso lo que siempre les pido a los Reyes Magos es que sigamos unidos, toda la familia, celebrando y compartiendo esos momentos. Para mí es así gracias a la tradición familiar y a la educación religiosa que recibí en la escuela. Soy católico y considero mi religión, la mejor de todas las que los humanos hemos inventado para dar una respuesta a los problemas de esta vida. Y con los años, la Navidad se ha convertido en unos días de reflexión. Me gusta leer los evangelios canónicos. También los pseudo evangelios y los apócrifos. Su lectura me ayudó, cuando era muy joven, a comprender el misterio de Jesús, del Cristo y la esencia de un Dios que existe, aunque no lo podamos demostrar. Les hago este comentario, estimados lectores, para animarles a que busquen media hora y lean algunos de los apócrifos que explican el nacimiento de Jesús, en la cueva de Belén. Sobre todo, el protoevangelio de Santiago, escrito entre el primer y el segundo siglo después del nacimiento de Cristo. Ya que, hoy en día, es leído en las comunidades cristianas de Oriente Medio. Aquí no, ya que en España solo se ha difundido a los cuatro evangelistas canónicos. A los otros, olvido, silencio y ocultación. Lean los apócrifos, donde encontrarán muchas historias sobre la natividad y sus personajes. Historias que hablan de lo que no hablan los canónicos. Con el burrito y el buey, los pastores y los Reyes Magos. Si les interesa el tema, aunque sea solo una hermosa tradición, encontrarán el que se puede suponer el primer milagro del Niño Jesús. Varios autores desconocidos, algunos desde el primer siglo, cuentan que al nacer el niño, José fue a buscar a una o a dos parturientas. Una de ellas, al ver que María parecía que no había parido a la criatura, metió el dedo en el seno de la Virgen y al sacarlo estaba completamente carbonizado. Imagínense la escena, los gritos y el miedo de lo que acababa de pasar, y sin poder entenderlo. Dicen los autores, que el niño sonrió a la comadre y el dedo volvió a la normalidad. Esta historia me gustaba mucho en la época que me interesaba por todo lo extraterrestre. Un niño que nace de una luz sobrenatural, que la madre ni se inmuta, que nace sin mácula ni suciedad y que sonríe desde el primer momento. Por cierto, escena que se utilizó en la llegada a la Tierra del que sería Superman. En el siglo 1, distintos autores cristianos dejaron en sus escritos que en Belén se visitaba la cueva en que se situó el nacimiento de Cristo. Historias verdaderas o falsas llenas de ilusiones, fe, y esperanza. Ese es el mensaje, que la maldad de este mundo pueda ser vencida por la ingenuidad de un niño que nace pobre, en una cueva, y que se enfrenta a la persecución del poderoso. Si comparan esta historia con la actualidad de los que intentan llegar a Europa, comprenderán el dolor de las madres que se despiden de sus hijos, aún bebés, para que lleguen a nuestras costas. Aquí no hay reyes que les persigan, pero sí poderosos que no los quieren. No hay reyes que les hagan regalos, solo ciudadanos que intentan que sean felices y vivan con más calidad de vida. No hay ángeles que anuncien la buena nueva. Pero sí hay personas que harán todo lo posible para que ese niño, que no es Dios, llegue a vivir como nuestros hijos y nietos, en paz, en armonía, con educación, salud, alegría y fe. Fe en la humanidad. Feliz Navidad para todos los hombres de buena voluntad. I Molts d’Anys.

¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (0)    No(0)

+
1 comentarios