LA NUEVA POLÍTICA
¿Cómo se ven las cosas cuando uno está libre de servidumbres políticas?
Con más objetividad e independencia. Y también con más tranquilidad.
Pues la cosa no está tranquila.
¡Gens ni mica!
Ya han pasado tres años de la llegada a Cort de eso que se dio en llamar la “nueva política”. Hemos visto en la sala de plenos camisetas de apoyo a Valtonyc, llamadas al boicot a Israel, declaración de persona non grata a Donald Trump... ¿Qué opinión le merece esa “nueva política”?
No son, en absoluto, temas para tratar en un pleno municipal. El equipo municipal de cualquier ciudad tiene por deber solucionar los problemas de los ciudadanos, lo demás son florituras. Lo primero son las soluciones que los ciudadanos de Palma requieren: limpieza, ruidos, urbanismo, que las licencias de actividad o de obras se tramiten en el tiempo que toca... ¡Es que hay mil cosas! Esos son los objetivos.
¿Pensaba usted cuando era alcalde que una cuestión como el monolito de Sa Feixina llegaría a monopolizar plenos enteros del Ayuntamiento?
No, que va, no lo hubiera imaginado. Es cierto que eran otros tiempos, ha llovido mucho desde que dejé el Ayuntamiento en el año 2003. Parece que tanto el Gobierno municipal como el Govern actúan buscando titulares. Su gestión es de titulares. A la hora de gestionar y de buscar soluciones efectivas se nota que falta algo. Lo digo con todo el respeto porque sé que es muy difícil gobernar, vaya por delante mi respeto tanto para José Hila como para el ahora alcalde Toni Noguera. No deberían preocuparse tanto por generar titulares de prensa.
PALMA CRECE, PALMA CAMBIA
Cuando llega a la alcaldía en 1991 se encuentra con una ciudad de unos 300.000 habitantes. La deja en 2003 con 367.000. Ahora superamos los 400.000. ¿Imaginaba usted este crecimiento?
Sí, pero la verdad es que no imaginábamos tanto crecimiento. En las últimas legislaturas hemos visto la inestabilidad de los países turísticos que nos rodean y ello no sólo ha traído más turistas, han venido muchos nuevos residentes. La inmigración se ha disparado. Si miramos las memorias de población que hacía mi estimado Agustí Estela, secretario del Ayuntamiento, siempre se seguían y se tenían en cuenta los cambios en la pirámide poblacional.
¿Cree que el crecimiento que vivimos entra dentro de lo sostenible?
Sí, por supuesto. La cuestión es planificar y actuar con una visión para solucionar los problemas, no para crearlos. Los problemas ya se crean solos, pero si tú te vas a las polémicas y a los titulares acabas complicando la cosa tú solo.
Hay cosas que han cambiado mucho. Ya no vemos militares en la Festa de l'Estendart aunque es una fiesta castrense y ahora el pancaritat del Diumenge de l'Àngel del Castell de Bellver se anuncia como una “passejada” con números circenses y castellers. ¿Hemos ido a mejor o a peor?
Hemos perdido. Tenemos unas tradiciones que debemos respetar por mucho que nos quieran imponer nuevas cosas. Nuestra tradición, las formas en las que hacemos las cosas, todo eso se debería mantener. Entrar en suprimir u olvidar nuestra Historia y tradición no es ni conveniente ni bueno. Por decir esto me tacharán de carca y caduco. Me da igual, nuestras raíces y tradiciones deben ser conservadas.
Da la impresión de que haya una cierta manía por reescribir la Historia...
Evidentemente, por parte de ciertas personas se ve que quieren reescribir la Historia. Por ejemplo, me llamó la atención que de la noche a la mañana se cambiara toda la fisonomía del salón de plenos. Quitaron el busto del rey para ponerlo en otro lugar, cambiaron de sitio los retratos de los hijos ilustres como si hubiera de primera y de segunda división. Mire, uno es hijo ilustre con todas sus consecuencias y su cuadro vale tanto como el de cualquier otro. Son cuestiones que demuestran esta parcialidad a la hora de gobernar. Y cuando uno gobierna, gobierna para todos los ciudadanos de Palma, te guste o no.
Tras sus tres legislaturas las cosas se pusieron complicadas. En Palma hemos llegado a ver pregones en el Ayuntamiento hechos casi a escondidas y manifestaciones muy violentas en la romería de Sant Bernat a raíz de la oposición al hospital de Son Espases de la plataforma Salvem la Real. ¿Hemos ganado democracia a cambio de educación?
Yo creo que democracia siempre ha habido. Me encuentro con personas de otros partidos que estaban en la oposición cuando yo era alcalde y nos saludamos cordialmente y hablamos, somos amigos y nos respetamos. Yo nunca he tenido la percepción de que no hubiera democracia. Pero sí, hemos perdido educación.
¿Son las plataformas reivindicativas teledirigidas desde los partidos políticos?
Sí. No todas, es cierto, pero la gran mayoría, sí. Siempre que hay una cuestión problemática se crea una plataforma. Tienes un montón de agrupaciones y asociaciones que todas se dicen cívicas... Con todos mis respetos, creo que la intención es honesta, pero no se puede abusar de estas plataformas. Sería mejor tener dos o tres principales, que unieran esfuerzos y que todos juntos trabajáramos para buscar soluciones, no ir buscando enfrentamientos políticos.
¿Qué ha significado para Palma la Casa Real?
En mi tiempo significaba mucho. Piense que el rey Juan Carlos y la reina Sofía tenían Palma como una de sus residencias fundamentales, favoritas. El rey Juan Carlos tenía una obsesión con nuestro centro histórico. Gracias a él tuvimos visitas tan importantes como los emperadores del Japón. ¡Los emperadores del Japón, que casi nunca iban a ningún sitio! El propio rey Juan Carlos les hizo de cicerone en persona para enseñarles el centro histórico de Ciutat, La Seu, La Almudaina... Vinieron los presidentes Clinton, Bush, Carter... De la casa real inglesa en Marivent, ni hace falta hablar. Otra cosa, tenemos las regatas Princesa Sofía, la Copa del Rey.... Están entre las más importantes del mundo. Demostraron tener un gran aprecio especial por Palma.
La cosa ha cambiado...
Sí, han pasado muchas cosas y ha cambiado. Pero según tengo entendido el rey Felipe VI ha dicho “este año, todos a Marivent”. Espero que sea verdad.
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TURISMO
Durante años se ha trabajado la imagen de Palma como ciudad turística, se ha luchado para atraer turistas en invierno... Ahora poco menos que nos sobran. ¿Qué ha pasado para que el turista se convierta en enemigo?
Creo que ha faltado planificación por parte de todos. No nos esperábamos, ya lo he dicho, el crecimiento que ha experimentado Palma. El turista lo primero que busca es seguridad, aquí la encuentra y por eso hemos vivido una avalancha tremenda. ¿Están preparadas nuestras infraestructuras? Pues no, no lo están. Tal vez nos hemos entretenido demasiado en discusiones y no hemos concluido proyectos necesarios como el segundo cinturón de Palma. No culpo a los que gobiernan ahora, que quede claro. Insisto, no lo vimos venir. Par las personas que viven en el centro histórico y en ciertas barriadas ha causado una lógica sensación de ahogamiento. Pero de ahí a pasar a atacar al turismo... Eso es una equivocación. Hay que regular, ordenar. ¿Se acuerda de lo de “un turista, un amigo”?
Claro que sí.
Pues eso: un turista es un amigo, no tiene la culpa de nada. ¿Qué culpa tiene un turista de que se junten unos cuantos cruceros en el Puerto de Palma? Me consta que Joan Gual de Torrella (nota: presidente de la Autoritat Portuària de Balears) mantiene contactos con las navieras al respecto. No hay que prohibir, hay que ordenar. Y tenemos medios para ordenar si entre todos trabajamos juntos, sin dejar lugar a los insultos.
Seguro que recuerda las campañas contra la Sexta Flota estadounidense y como su marcha dejó a Palma sin miles de visitantes.
Uf, claro que me acuerdo.
¿Puede pasar lo mismo con los cruceros?
Podría pasar... Estamos tocando la médula de nuestra economía que es el turismo. Claro que hay problemas, y claro que debemos solucionarlos. Pero para eso uno se mete en política y se presenta a unas elecciones. Si un político no encuentra ayuda en su equipo debe acudir a empresarios, comerciantes, ciudadanos... Hay mucha gente que puede ayudar y aportar ideas para buscar soluciones. Ojo, nos estamos cargando la gallina de los huevos de oro.
EL VALOR DEL DIÁLOGO
¿Qué queda por hacer en Palma?
Tenemos muchos problemas nuevos debidos al aumento de población que, reconozco, se me escapan un poco. Aún así hay cosas que siempre han quedado pendientes y que deberíamos afrontar.
¿Me puede dar un ejemplo?
El Puerto de Palma. Ciutat siempre ha vivido de espaldas al Puerto, incluido el Passeig Marítim, barriadas como Gènova y Sant Agustí... Hay otra gran cuestión pendiente, es el transporte público. Matas intentó que funcionara el metro, el gobierno de izquierdas de ahora parece que apostará por más tren y tranvía... Y cuestiones principales como la limpieza, que está fallando, el orden público... Es que hay barrios en los que la droga ha hecho mucho daño. Mire Son Gotleu, escuchemos a Gines Quiñonero (nota: histórico líder vecinal), es una pena.
Pues parece imposible que los socios de Cort se pongan de acuerdo para aprobar la ordenanza cívica. Lleva meses de retraso, la Policía Local la pide, y no sale adelante.
No creo que sea imposible, lo que pasa es que hace falta consenso, hablar. Mire, la Platja de Palma es una zona que da problemas. Recuerdo que en el año 1992 me reuní con el jefe de la Policía Local, que entonces era Joan Feliu, y le dije: “vamos a buscar una solución, ¿qué tenemos en la Platja de Palma?”. Es uno de los grandes núcleos turísticos de España y tiene sus problemas y puntos conflictivos: la Bierstrasse, la venta ambulante, la prostitución, el transporte público... Los vecinos están cansados, tenemos hoteleros, empresarios de discotecas, de comercios... Todos tienen sus intereses. Los reuní a todos gracias a Luis Riu padre, en paz descanse, que nos dejó el hotel Riu Bravo. Allí estaba Policía, Emaya, EMT, vecinos, hoteleros.... Todos estaban y a todos se les pidió qué hacer. Y se hizo: se vallaron solares, se mejoró la iluminación, se mejoró el transporte... Se intentó todo y hoy vemos que los problemas persisten. Vemos como cada colectivo se preocupa por sus intereses y su egoísmo, por decirlo de alguna manera, le impide trabajar juntos. Pero sí, tenemos que sentarnos las veces que haga falta, hablar las cosas y llegar a acuerdos. Esto va de buena voluntad y consenso. Y eso es aplicable a todos los problemas de Palma. Se puede hacer. ¿Se acuerda usted de los problemas de falta de agua?
Vaya si me acuerdo, y de la calidad del agua del grifo, que parecía de todo menos agua.
¿Y de la Operación Barco?
Claro.
Pues eso lo hicimos junto a Margarita Nájera que era alcaldesa de Calvià y a Josep Borrell, que ahora vuelve a ser ministro. ¡Trajimos agua en barco porque no había! Luego vinieron las desaladoras, los trasvases, Sa Costera que nos permite llenar s'Estremera... Hoy tenemos agua. Y eso gracias a sentarse y a hablar las cosas. Creo que los que gobiernan en el Ayuntamiento en verdad quieren hacer las cosas bien. Lo que pasa es que a veces se ponen por delante las consignas políticas de los problemas reales.
EL PP EN PALMA
Cuando ve a los que le han sucedido meterse en un charco, ¿se muerde la lengua, tiene ganas de decirle que se equivocan...?
Siempre tengo oportunidad de hablar con ellos.
¿Le llaman del partido para pedirle opinión sobre cuestiones de Palma?
Si, y últimamente he tenido reuniones con Biel Company. Soy consciente de que yo veo las cosas desde un punto de vista un poco externo, y los problemas internos de un partido son muy grandes. El PP se encuentra con grandes problemas. Los actuales dirigentes necesitan todo el apoyo que les podamos dar, si se dejan.
Hasta hace poco se daba por sentado que Marga Durán sería la candidata a la alcaldía en las elecciones de 2019. Hace unos meses se supo que la dirección del partido había contactado con el exalcalde Mateo Isern y que cabía la posibilidad de que fuera él, y no Durán, el candidato. ¿Se atreve a mojarse por uno de los dos?
Bueno... Es que los dos son mis amigos y además son muy válidos. Me pone en una tesitura difícil. Marga ha hecho un gran trabajo. Estar en la oposición es muy difícil. Yo estuve ocho años.
Dicen que un político da la talla en la oposición...
Dicen que gobernar es difícil, pues la oposición... Estar en la oposición quema, quema mucho. La pregunta que usted me hace es difícil, además es posible que aún haya otros candidatos. Debemos reconocer tanto la gran tarea de Marga y la que hizo Mateo como alcalde. Dudo de que Mateo tenga ganas de repetir, se le hizo mucho daño, lo engañaron... Fue un buen alcalde y Marga es una gran líder de la oposición.
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El PP ANTE EL CAMBIO
La situación que atraviesa el PP a nivel nacional tendrá su eco en Balears. ¿Es necesaria una regeneración del PP a nivel nacional?
Podemos llamarlo regeneración, cambio de aires.... Todos los partidos, llegado el momento, deben afrontar una renovación. Fijémonos que en los actos importantes de Rajoy, al margen del Gobierno, siempre ha estado Nuñez Feijoo. Hemos visto que en 24-48 horas ha habido un cambio de Gobierno con una moción de censura. Todo ha ido muy rápido y no se puede cambiar el partido corriendo. Es momento de parar a pensar, de poner los puntos sobre las íes y de hacer las cosas paso a paso.
En otros casos hemos visto que las crisis profundas de los grandes partidos tardan un tiempo en solucionarse. Ahora el tiempo es algo de lo que no dispone el PP porque en mayo de 2019 hay elecciones autonómicas y municipales en buena parte de España. ¿Llegará el PP a tiempo?
Esa es la pregunta del millón... (ríe) Es difícil. La moción de censura nos ha pillado a todos con el paso cambiado. Nadie pensaba que el PNV tras aprobar los Presupuestos Generales del Estado votara contra Rajoy.
Pues le han hecho la púa...
Pues, mire, resulta que sí. Creo que mucha gente del PP, de Ciudadanos, de centro-derecha, no creía que veríamos este Gobierno Frankenstein.
Tal vez es que no han visto lo que pasa aquí, que llevamos tres Pactos de Progreso...
Sí, pero nadie se lo pensaba. Mire Ciudadanos, están en silencio absoluto. A mis compañeros de partido les deseo lo mejor y que conserven el sentido del tempo, el tiempo lo es todo en política. Vivimos momentos convulsos para nuestra querida España. Y como dice, tenemos las elecciones de 2019 mañana, están al caer.