La propuesta lanzada por el diputado ibicenco Miquel Jerez es una cuestión de justicia porque en el Aeropuerto de Son Sant Joan, los pasajeros que toman un vuelo con destino a Menorca y Eivissa tienen un filtro de seguridad específico, mucho más cercano a los mostradores de facturación y que evita una larga caminata y además, hacer cola en el mismo control que el resto de pasajeros de otros vuelos que no son interislas. Si es posible en Mallorca, también debe serlo en el resto de islas. Se trata de facilitar la movilidad a los habitantes de Baleares que se ven obligados a tomar un avión y no precisamente para hacer turismo, sino por obligación.
La iniciativa del Partido Popular de Eivissa es muy adecuada y se supone que será aprobada sin ninguna objeción por el resto de grupos de la cámara. Y AENA haría muy bien en estudiar su implantación sin importar el resultado de la votación, pues haría las cosas más fáciles a los pasajeros de las islas menores y les ahorraría tiempo, pues en horas punta y en los meses de temporada alta, no se tarda poco en pasar la cola de los filtros de seguridad. Ibiza y Menorca deben recibir el mismo trato que Mallorca.
