Las aguas bajan turbulentas en el mundo de la política y dicha turbulencia ha alcanzado al poder judicial. Ese poder creado, según la división de Montesquieu, como contrapeso al legislativo y al ejecutivo. La división de poderes es esencial en un estado democrático pues cuando se unen bajo una misma autoridad los tres poderes estamos ante una dictadura. Ejemplos, desgraciadamente, hay muchos, que van desde la hermética Corea del Norte, China, Países Árabes, Rusia, Cuba y Venezuela, entre muchos otros. Lo podemos llamar como queramos pero son dictaduras. A unas las vemos con mejores ojos al tener dinero y organizar mundiales de futbol o juegos olímpicos y a otros de forma peor al ser pobres y no tener nada que ofrecer al hipócrita occidente.
La Toga es una prenda, parecido a una túnica, que tenemos el privilegio de vestir aquellos que actuamos ante los Tribunales, forman parte de los tribunales o son doctores en cualquier rama de la ciencia. Su origen lo encontramos en Roma en el Senado y también la vestían los cónsules y los jurisconsultos.
La toga imprime carácter. Cuando uno se reviste con la toga asume un compromiso de defender a un cliente hasta donde su ciencia alcance dentro de los límites de la Ley. El hecho de que un cliente sea un delincuente, presunto o condenado, no convierte a su defensor en delincuente, cosa que algún tribunal de esta Ciudad no ha entendido o querido entender en alguna ocasión. Pero sin duda quien actúo así pagará por ello o por otras erróneas interpretaciones que ha venido efectuando en los últimos tiempos.
Los hombres de derecho somos gente de paz, creemos en la Ley como elemento imprescindible para resolver conflictos y no entendemos, nos cuesta, cuando vemos a los políticos enzarzarse en discusiones inverosímiles que afectan al mundo del derecho y por ende a la ciudadanía desde una oceánica ignorancia.
Un día, una señora ministro, dijo que en el autobús, como si ella fuera en lugar de usar el coche oficial, la gente estaba escandalizada por la falta de renovación del CGPJ; esa señora nos toma por imbéciles. La mayoría de la ciudadanía no sabe que quieren decir esas siglas y ella no viaja en autobús, no sea que se le contagie algo.
Saben, me hubiera gustado que el Colegio al que estoy adscrito hubiese realizado algún tipo de comunicado o bien el Consejo General de la Abogacía cuando se habla de golpe de estado de togas. Obviamente no se refieren a los Abogados pero si tiene algo que decir, la voz de nuestro colectivo en materia de derecho es una voz importante y con conocimiento de causa y tiene la obligación de que la sociedad la oiga; creo nuestro colectivo lo que demanda del gobierno de la nación es que legisle de acuerdo a derecho, que dote a los juzgados de instalaciones dignas, sin lujos pero que superen una inspección de trabajo, que las reformas legislativas que se efectúen tengan una duración en el tiempo y no, como por ejemplo con la Ley Concursal, que la pobre tiene más reformas que años de vigencia.
También queremos que se legisle con respeto a quienes llevamos toga y tenemos que interpretar y aplicar las leyes desde nuestro puesto, desde el que elegimos en su momento. También queremos que se legisle para toda la ciudadanía y no se legisle ad personam. ¿De verdad que la primera necesidad del país a diciembre de 2022 es la supresión de la sedición y la reforma de la malversación?
Usar la Ley, legislar, ad personam es ilegal e inconstitucional; no cabe regular un delito para una persona o colectivo concreto y mucho menos vale para resolver una situación de conflicto político. Es inaceptable que cuando el Tribunal Supremo, máxima autoridad en interpretación de las leyes, resuelve cualquier asunto en un determinado sentido, el Gobierno de la Nación modifique por RD (real decreto) la norma sin la existencia de debate parlamentario e informes preceptivos para la aprobación de una Ley y así no tener la necesidad de cumplir la Sentencia. Eso además de ilegal es inmoral y socialmente inaceptable por lo ruin que es.
Si el gobierno quiere hacer algo de verdad para la Justicia en primer lugar debe quitar sus sucias manos de dicho Poder para contentar a los pocos miles miembros de ERC, Bildu y PNV, en perjuicio de los más cuarenta millones restantes de españoles obviando el principio de la soberanía nacional; después dotar de medios a la Justicia para que un juicio no sea señalado actualmente para el año 2025, que en cuanto se resuelva ese asunto la resolución ya no será justa, y dotar de toda la dignidad preceptiva al turno de oficio de los Abogados. Esa además sería una medida social pues mejorarían los derechos de los ciudadanos más pobres a la hora de defender sus derechos ante los Tribunales. Pero claro, la voz de los pobres no interesa. Existe señor Sánchez justicia para ricos y para pobres y eso no solo depende de los Tribunales sino de la partida presupuestaria que consigne en sus presupuestos para el próximo ejercicio fiscal.
El país, jurídicamente hablando, está en crisis y lo está por la falta de altura política y humana de los dirigentes; que se aprueben leyes como el “si es si” que lleva a aplicar el principio in dubio pro reo que obliga a los Tribunales de Justicia a reducir penas de abusos sexuales e incluso a excarcelar a criminales nos debe dar que pensar. Un país serio jamás aprobaría una ley en esos términos y vistos los efectos perversos que produce su impulsor debería dimitir y no culpar a quienes están obligados a aplicarlas.
Dicho esto, creo que sin irrogarme ninguna representación que no me corresponde pues no la tengo, solo me represento a mi, a título personal exijo a los partidos políticos que saquen del debate político a la Justicia pues es un poder del Estado que entre sus funciones está la de controlar al Gobierno de la Nación y si este Gobierno pretende hacerse con la autoridad que emana del pueblo y corresponde al Poder Judicial lo que estará haciendo es dar un golpe de estado privándonos a los ciudadanos de la certeza de que el Gobierno de la Nación está vigilado para que sus actuaciones no sean contrarias a derecho. El premier Sánchez pretende que los Juzgados apliquen sus leyes, como paso de manera idéntica en el tercer Reich. Eso señor Sánchez es contrario a la democracia y al estado de derecho y se llama dictadura.
Para terminar una pequeña frivolidad, creo que el debate Messi-Cristiano desde el domingo ha finalizado.
Feliz Navidad para todos aquellos que creen, también para aquellos que no creen o apostatan, que la luz de la Navidad os ilumine y que ilumine especialmente a nuestros gobernantes para que trabajen a favor de la paz y la extinción de la pobreza.