Por su parte, un total de 31.750 pacientes esperaban ser atendidos por un especialista. El tiempo de demora ha bajado un 56% (35,3 días), al pasar de una media de 63,6 días en el 2016 a los 28,2 días en 2017.
Asimismo, ha bajado un 81% el número de pacientes que esperaban más de dos meses para una consulta, pasando de los 16.647 de junio de 2016 a los 3.212 de junio de 2017, lo que representan un total de 13.435 pacientes menos.
Según ha indicado Fuster, se trata de una bajada "notable" de tiempo de espera "lo que implica un gran esfuerzo de los profesionales".
DECRETO DE GARANTÍA DE DEMORA
Con todo, ha admitido que, aunque los datos "son positivos", todavía no cumplen con los objetivos del decreto de garantía de demoras establecido por el Govern. "No nos quedaremos satisfechos hasta que no quede ningún paciente por encima de los límites que nos hemos marcado", ha afirmado al respecto.
El director general del Ib-Salut ha señalado que el Govern mantiene su compromiso de poner en marcha el decreto de demoras a principios de 2018, por lo que se prevé que el Ejecutivo balear apruebe a final de año el decreto, que establece un periodo máximo de espera de seis meses para intervenciones quirúrgicas e inferior a 60 días para consultas externas.
MAMOGRAFÍAS
Con todo, Fuster ha admitido que los datos no son tan positivos en relación a la demora de las mamografías, establecida en 48,27 días, y la que ha atribuido "al incrementado el número de peticiones, pero también debido a la obsolescencia de los equipos radiológicos".
En este sentido, ha apuntado que "ya está en marcha el concurso para poder disponer de maquinaria nueva, lo que ayudará de manera importante a mejorar este dato".