Nuevo traspiés del Atlético Baleares, que empata sin goles en su estadio ante el Navalcarnero

El entrenador catalán puso en liza un once con algunos cambios respecto al que arrancó un empate, el pasado domingo, en el feudo del líder del grupo, el San Sebastián de los Reyes.

Con René en portería, Roger alineó una línea de cuatro zagueros formada por Luca Ferrone, Peris, Cristian y Olaortua, que recuperaba la titularidad tras su partido de sanción; en la medular, el técnico apostó por improvisar con dos futbolistas inéditos hasta ahora en esta demarcación, Liam Ayad y Fito Mirada, apoyados en las bandas por David Haro y Canario, y, finalmente, dispuso una doble punta de ataque formada por Manel Martínez y Vinicius Tanque.

El ATB entró bien en el choque, dominador y dispuesto a lograr la victoria, consciente de la importancia del resultado. Sin embargo, la primera gran ocasión sería para los visitantes. Corría el minuto 11 cuando René, en una gran intervención, blocó la pelota ante Mario e impidió que el Navalcarnero inaugurara el marcador. No obstante, al minuto siguiente, una portentosa asistencia de Peris fue rematada de cabeza por Manel Martínez con la mala suerte de que la madera escupió el testarazo del delantero catalán, que todavía no ha podido inaugurar su cuenta particular desde que fichó por el ATB en este último mercado de invierno.

POSIBLE PENALTI QUE EL ÁRBITRO NO CONCEDIÓ

En el minuto 24, los blanquiazules reclamaron un posible penalti cuando un centro de Canario pareció golpear en las manos de un defensa rival. El árbitro, Godia Solé, del colegio catalán, no apreció ningún tipo de infracción. Unos diez minutos después, la oportunidad cambiaría de bando. Dani del Moral le gana en velocidad a Peris y su disparo es enviado a córner por René en otra excelente intervención.

En el 42, la ocasión corrió a cargo de Vinicius Tanque, tras un saque de falta botado por Fito Miranda. El remate del jugador cedido por el Cartagena, demasiado flojo, acabó sin mayores contratiempos en las manos del guardameta del Navalcarnero, Néstor Díaz, que, a partir de esta acción, fue erigiéndose en el gran héroe de su equipo con sus meritorias intervenciones. Antes del descanso, Manel Martínez volvió a poner en peligro la portería visitante, pero su marcador supo rehacerse y le impidió efectuar un remate con mayores garantías.

El ATB siguió porfiando en busca de la victoria nada más reanudarse el partido. De esta manera, con apenas tres minutos disputados, una gran triangulación entre Peris, Vinicius y Manel Martínez estuvo a punto de acabar en el fondo de las mallas, pero Néstor intervino con eficacia. En el 60, una asistencia de Alberto Gil desde la frontal acabó en las botas de Vinicius, pero su lanzamiento se marchó fuera, por escasos centímetros. El ‘9’ blanquiazul tendría una nueva oportunidad tras una cabalgada de Luca Ferrone por la derecha. Sin embargo, el portero de Navalcarnero respondió nuevamente con seguridad.

ROGER MUEVE EL BANQUILLO, SIN ÉXITO

Con el reloj avanzando a pasos agigantados, Manel lo intentó con un remate de cabeza que Néstor neutralizó, sacando el esférico con la punta de los dedos cuando ya estaba a punto de rebasar la línea de gol, en la que fue una de las ocasiones más claras del encuentro.

A falta de un cuarto de hora para la conclusión, Jordi Roger movió el banquillo e introdujo en el campo a Baselga y Acosta en sustitución de Manel Martínez y Liam Ayad. Poco después, ingresó en el campo Armando ocupando la plaza de Alberto Gil. Sin embargo, las sustituciones no ofrecieron el resultado apetecido.

En cambio, el Navalcarnero estuvo a punto de sumar los tres puntos cuando, ya con el choque en su recta final, David Rodríguez dispuso de un mano a mano ante René que el meta resolvió con una portentosa intervención.

Este empate aleja todavía más al Atlético Baleares del que es su único objetivo esta temporada, el ascenso a Segunda División. El próximo domingo, los blanquiazules tendrán, ante Las Rozas, una nueva oportunidad de rehacer su decepcionante trayectoria. No obstante, las opciones son de cada vez más escasas, y el fantasma de una campaña en blanco, tras el cuantioso presupuesto invertido en fichajes, empieza a revolotear de forma insistente en el entorno del Estadio Balear.