Los datos del reciclaje en Balears siguen creciendo paulatinamente hasta superar las 36.000 toneladas de envases domésticos recogidos en 2017, según datos de Ecoembes. El dato, conocido este jueves con motivo del Día Mundial del Reciclaje, constata tres años seguidos de incrementos por encima del 10 por ciento anual en el caso de envases de plástico, latas y briks, y del 4,5 por ciento en el caso de papeles y cartones.
Para alcanzar estos datos, la citada organización medioambiental que promueve el reciclaje destaca la labor desarrollada conjuntamente por ayuntamientos, empresas, entidades y, especialmente, por los ciudadanos que en unos años hemos ido asumiendo la tarea de separar los residuos para reciclar todo aquello que se pueda.
El papel de la administración para hacer que determinadas actuaciones se conviertan en hábitos cotidianos ha sido determinante desde hace ya bastantes años. En la actualidad, 35 municipios de Mallorca tienen implantada la recogida selectiva a la puerta de los hogares, a lo que hay que sumar más de 1.300 puntos de reciclaje repartidos en espacios públicos y los proyectos de recogida implantados en el sector de hoteles y restaurantes, cuya capacidad de generar residuos es considerablemente alta.
En Palma, donde es habitual la imagen de contenedores desbordados y de muebles tirados en las aceras, la recogida selectiva, sin embargo, ha permitido el reciclaje del 23,5 por ciento de los residuos generados por los palmesanos, según datos del mes de abril. La cifra representa 4,6 puntos porcentuales más que el mismo mes del año anterior, señala Emaya, aunque está muy por debajo del objetivo europeo que marca para el 2020 una tasa de reciclaje del 50 por ciento. Según la empresa municipal, el dato crece porque crece la actividad económica, pero aún hay mucha cantidad de residuos no reciclados y la recogida selectiva sigue sin llegar a bastantes zonas de la capital.
La administración debe mantener el esfuerzo para dotar de medios al reciclaje, incrementando sus recursos disponibles para poder llegar a todas partes, y llevando a cabo constantes campañas de concienciación para que los ciudadanos puedan involucrarse en una tarea cada vez más necesaria. Especialmente en entornos como el nuestro.