El Molinón no era un <campo asequible y las aspiraciones tampoco eran muy grandes. El
Sporting es mucho más equipo (opta claramente al ascenso) y sus jugadores corren más que los del
Real Mallorca.
Aunque se sabía que el desplazamiento era complicado, al equipo del Nanu Soler se le han vuelto a aparecer este domingo
todos sus defectos. No se puede aspirar a mucho cuando no se chuta a puerta en los 93 minutos que duró el partido. Suerte de un Cabrero que tuvo tres intervenciones que impidieron una derrota aún mayor.
1-0 al final del partido gracias al gol de penalty marcado por
Hugo Fraile. De nuevo, el Real Mallorca no fue capaz de acabar un partido con los 11 jugadores sobre el terreno de juego.
Pau Cendrós fue expulsado a 10 minutos del final cuando sólo llevaba unos segundos en el campo.
Con esta derrota, el Real Mallorca no se despega de la zona de riesgo y sigue a seis puntos del descenso. Y el domingo el rival es
un Betis imparable.