Bosch y Aguiló se consuelan

Ha pasado un mes después de sus respectivas destituciones, y ambos ya tienen trabajo. Rafael Bosch y Josep Ignasi Aguiló desayunaron juntos este martes en el Forn de Campos de la Gran Vía Asima del Polígono de Son Castelló. Está a escasos metros del pequeño despacho que ahora ocupa Bosch como asesor técnico en la Conselleria de Economía del Govern.

El Infiltrado los descubrió entre cafés y croissants. Prefirieron no ser fotografiados ni hacer declaraciones, aunque no se escondían. Lo que sí ha sabido El Infiltrado es que ambos exconsellers dedicaron buena parte del encuentro (que duró un mínimo de 45 minutos) a comentar las últimas decisiones tomadas por el Govern. Aguiló, por ejemplo, no ocultaba su estupefacción por la decisión de sus dos sucesores de suspender los nuevos impuestos que tanto tuvo que defender él durante los últimos meses. No hay que olvidar el detalle de que uno de sus sucesores es ahora el jefe de Bosch.

Entre cafés también hicieron sus particulares comentarios sobre la política del Govern en materia lingüística.

Finalizado el desayuno -ambos sin corbata-, Bosch volvió a su despacho de la Conselleria y Aguiló se desplazó a la UIB, su actual puesto de trabajo.