La sala magna del Club Náutico de Palma, ha cogido un interesante debate sobre “La influencia del fondeo en la posidonia”, organizado por la Asociación de Navegantes del Mediterráneo (ADN).
La mesa redonda se articuló con motivo de la redacción de los nuevos
Planes de Gestión de 11 LICS o zonas de especial protección, por parte de la Conselleria de Medi Ambient. Dichos Planes extienden las influencias de protección de la posidonia en buena parte del litoral.
De llevarse a cabo su aprobación, en los términos en que actualmente están redactados, se generarán nuevas restricciones al fondeo, bajo el pretexto de proteger la posidonia, y también abrirán la puerta a la instalación de
nuevos campos de boyas de pago y/o a la creación de marinas encubiertas.
Todo ello, según la Asociación de navegantes, repercutirá negativamente en la náutica de recreo. También supondrá una nueva carga negativa sobre el incipiente proceso de fomento del Turismo Náutico, definido por todos como un interesante segmento de mercado turístico alternativo al tradicional de sol y playa.
El acto fue presentado y moderado por
Gabriel Morell, presidente del Asociación, y contó con las intervenciones de
Carlos Garau, ingeniero de caminos, canales y puertos,
Jaime Ros, licenciado en Ciencias del mar y buzo profesiona y Juan
Besalduc.Los ponentes, bajo distintos puntos de vista, coincidieron en apuntar la baja incidencia que tiene el fondeo de la embarcaciones de recreo sobre los campos de posidonia, en comparación con otras amenazas como emisarios de depuradoras, desaladoras, regeneración de playas o movimientos de arena, depósitos de sedimentos, pesca de arrastre, especies invasoras, calentamiento del agua, etc..