Hace unos días era la periodista de la Cadena Ser, Gemma Nierga, la que llevaba el conflicto de las rotondas al ámbito estatal. Fue en el programa "Hoy por Hoy", que escuchan cada día más de 3 millones de personas. Puso el tema en situación el periodista de Radio Menorca, Lluís Soler, siguió una entrevista con el portavoz del GOB, Miquel Camps, y se acabó dando la voz a los oyentes.
La pasada noche de domingo fue la periodista Ana Pastor quien trató la polémica en su programa El Objetivo de La Sexta. En esta ocasión se había filtrado que el tema iba a ser tratado y fueron muchos los menorquines que se quedamos pegados a la tele hasta las tantas engrosando el share de un programa que suele rondar el 11%, unos 2.400.000 espectadores.
Aunque quizá muchos esperaban un trabajo más profundo, contrastando opiniones, haciéndose eco del conflicto real, en realidad el trato que se dio a las polémicas rotondas no pasó del chascarrillo, casi ridiculizándolo, poniéndolo al nivel de lo absurdo y metiéndolo en el saco de las atrocidades inmobiliarias donde andan los aeropuertos sin aviones o los ascensores en descampados.
Sus razones tendrán quienes defiendan estas faraónicas obras pero parece claro que, para quien nos ve desde fuera, juntar en la misma frase Menorca, rotondas a doble nivel y Reserva de la Biosfera, suena a guasa. Pero si además añadimos el problema de los 3 millones de euros de sobrecoste, la cosa ya huele peor.
Sea como fuere, nuestra isla lleva una semana apareciendo en medios de comunicación estatales y no precisamente para hablar de nuestra magníficas playas o nuestro sabroso queso.
Esperemos que impere finalmente la cordura y se pueda encontrar una solución para un tema tan espinoso, que nos afecta no sólo en lo estrictamente material, sino que también nos crea un grave problema de imagen en el exterior.
