El 84 por ciento de los que han participado en la última encuesta del digital así opinan, frente a un 16 por ciento restante que no creen que algún desconocido pueda establecerse en su propiedad.
Palma, Marratxí o Llucmajor son algunos de los municipios más afectados por esta lacra, aunque hay casos en prácticamente todas las localidades.
Pisos, plantas bajas o fincas enteras: el fenómeno no cesa y las comunidades de vecinos y propietarios tienen que invertir, cada vez más, en alarmas o vigilancia para evitar las entradas y en caso de materializarse, llevarlo a los Juzgados, aunque algunos usuarios optan por métodos como el de Desokupa.