Los abusos comenzaron cuando las víctimas tenían seis años de edad y sucedían cuando el ahora detenido se quedaba a solas con ellas.
El primer caso del que tuvo conocimiento la Policía Nacional fue a raíz de la denuncia de una de las víctimas que explicó a los agentes que cuando ella tenía seis años y estando en una autocaravana con sus familiares, estos salieron y se quedó a solas con su tío.
Al parecer, el hombre le propuso entonces un juego en el que aprovechó para someterla a abusos que cesaban al llegar el resto de familiares.
Según explicó la víctima, estos juegos se repitieron a lo largo de los años y se trasladaron al domicilio del tio donde a veces se quedaba a dormir junto a su madre. Según el testimonio de la joven, los tocamientos y abusos se iniciaban en cuanto su madre se iba a dormir.
Este tipo de comportamiento se mantuvo hasta que ella cumplió los 12 años y ha sido tras un largo periodo de tiempo cuando se ha decidido a dar el paso y denunciar lo ocurrido años atrás.
Tras iniciar las investigaciones, la Policía Nacional averiguó la existencia de otra víctima de la que el detenido abusó unos 15 años atrás, cuando ella tenía también unos 6 años de edad aunque en ese caso los abusos no se prolongaron tanto en el tiempo pues la menor dejó de acudir al domicilio del denunciado.
En este caso, los abusos sucedían cuando ella se quedaba a dormir en casa del detenido donde ellas dormía en su cama al ser pequeña y él realizaba tocamientos hasta que se despertaba.
Esta última víctima, al tener conocimiento de que una familiar suya habría sufrido abusos parecidos por parte del mismo individuo y lo había denunciado, se decidió también a denunciar.
Por todo lo expuesto, el hombre ha sido detenid y se la acusa ahora de cometer dos delitos de abusos sexuales continuados a menor de 16 años.
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