Tras analizar varias denuncias que se habían presentado por robos en domicilios y casas de campo de Llombards, la Guardia Civil de Santanyí inició una investigación en la que se descubrió en un primer momento, que en la totalidad de los hechos el 'modus operandi' era el mismo.
Los ladrones accedían a las viviendas tras forzarlas y después sustraían diversos objetos, como material de obra, electrodomésticos, cables de cobre e instalaciones y paneles de energía solar.
Los agentes encontraron un domicilio donde en su interior hallaron numerosas herramientas de obra, 11 placas solares, un remolque y dos embarcaciones auxiliares neumáticas, entre otros efectos, todo ellos valorado en 36.000 euros.
Además, en el registro se encontró una plantación indoor de marihuana compuesta por 19 plantas.
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