La Policía Nacional arrestó la pasada madrugada en Eivissa a un joven de 26 años tras protagonizar una acalorada discusión en una vivienda. Cuando la patrulla llegó al lugar, uno de los moradores del domicilio indicó a los agentes que el ciudadano no dejaba de entrar y salir de la casa, pese a no residir allí. Los funcionarios policiales comprobaron que el joven había sido propuesto para sanción dos veces, el 29 de marzo y el cinco de abril, por lo que procedieron a su detención.
En Mallorca, la Guardia Civil arrestó ayer en el Port d’Alcúdia a un conductor de 34 años después de ser identificado en un control cuando circulaba en un vehículo junto a dos personas más. Tras su identificación huyó del lugar y fue interceptado instantes después. El ciudadano se resistió y agredió a los agentes. Los otros dos ocupantes fueron denunciados por desobediencia por incumplir las restricciones del estado de alarma.
En Palma, la Policía Local detuvo ayer por la tarde a un joven de 24 años que se hallaba en la vía pública sin causa justificada. El ciudadano alegó que estaba esperando a otra persona que le trajera dinero. Los agentes constataron que se le habían levantado tres actas administrativas por desobediencia el pasado 18 de marzo y el 11 de abril.
Por último, la Policía Nacional arrestó ayer a las ocho y media de la tarde a un hombre de 45 años en el casco antiguo de Palma. Los vecinos de la zona habían alertado a la sala del 091 de que un ciudadano sin camiseta estaba gritando en la calle, insultando y amenazando a los residentes que habían salido a los balcones a aplaudir. Cuando la patrulla acudió a la zona, el hombre continuó muy agresivo y alterado, con síntomas de hallarse bajo los efectos del alcohol. No atendió a las indicaciones de los agentes, les insultó, increpó y trató de agredirles, hasta que finalmente fue reducido y detenido.