Son cuatro jóvenes, tres españoles de 18, 20 y 22 años, y un polaco de 21 años. Los hechos ocurrieron de madrugada en la calle Hort de Torrella, en Pere Garau.
Agentes de paisano de la CNP observaron a dos jóvenes en actitud sospechosa en las inmediaciones de la casa. Les dan el alto y les identifican. En ese momento se percatan que la persiana de la casa está rota y los chicos les confiesan que han sido ellos, que han entrado y han sustraído diversos bienes: un motor de embarcación, cuatro órganos y diversas torres de ordenador.
Además, les informan que dentro de la casa -que no está habitada- hay otros dos varones escondidos.