Un falso revisor de gas engaña a seis ancianas en Palma y se lleva 30.000 euros en joyas

La investigación se abrió el pasado mes de octubre, cuando en la Jefatura de Policía comenzaron a recibirse denuncias de mujeres que habían recibido una llamada de una supuesta empresa de gas que les informaba de que debían pasar una revisión obligatoria y que un técnico se dirigía a su domicilio.

Apremiadas por su interlocutor, las víctimas le franqueaban el acceso a su vivienda a un varón que portaba lo que parecía un carné de técnico autorizado y realizaba un examen de la instalación, por el que les pretendía cobrar distintas cantidades. En la mayoría de los casos, lograba quedarse a solas en algún momento, bien cuando la víctima iba a buscar dinero para pagarle, bien con la excusa de ir al baño u otros pretextos, momentos que aprovechaba para apoderarse de cualquier objeto de valor que hallase, por lo general joyas pero también dinero en efectivo.

En total, sumando las seis víctimas, el sospechoso habría obtenido, entre los pagos por las revisiones falsas y el dinero sustraído en sus viviendas, una cantidad cercana a los tres mil euros. Sin embargo, el grueso del botín lo habría logrado sustrayen a sus víctimas joyas cuyo valor total rondaría los 30.000 euros, y que en la mayoría de los casos tenían, además, un elevado valor sentimental para las víctimas.

Tras arduas indagaciones, los investigadores de la Comisaría de Distrito Centro comprobaron que, a principios de octubre, el sospechoso había llegado a la isla, si bien ya había residido en Palma años atrás, tiempo en el cual trabajó para una empresa de instalaciones de gas.

Sin embargo, el detenido no había vuelto a trabajar para ninguna empresa desde 2017, y, por tanto, no estaba facultado para realizar ningún tipo de revisión. En realidad, el hombre se inventaba estas supuestas revisiones obligatorias para engañar a sus víctimas, a las que contactaba llamando sistemáticamente a teléfonos fijos de Palma hasta ser atendido por mujeres de edad avanzada a las que sondeaba para saber si estaban solas.

Sobre el sospechoso pesaban órdenes de busca y captura por Juzgados de distintas provincias, comprobando los investigadores que en los últimos meses habría cometido numerosos hechos similares en Galicia, Asturias y Cantabria, lugares de los que había logrado huir cuando la Policía ya estaba tras su pista.

La localización y la detención del falso revisor fue dificultosa para los investigadores, ya que evitaba dejar cualquier rastro, viajando con un vehículo a nombre de una empresa de renting y usando líneas de teléfono que estaban a nombre de terceras personas.

Finalmente, los policías lograron detenerle el pasado lunes, mientras llamaba a posibles víctimas. En su vehículo hallaron numerosos efectos que empleaba para fingir ser un revisor de gas, tales como una acreditación falsa, herramientas, documentos de distintas empresas oficiales y facturas en blanco.

Los agentes procedieron a registrar su domicilio, donde encontraron distintas joyas y piezas de bisutería que aún no había vendido, parte de dinero del botín, una báscula de precisión con la que pesaba su botín, un segundo carné falso de instalador de gas y otros documentos que están en estudio, pues no se descarta que se le puedan atribuir nuevos delitos.

El presunto autor pasó ayer a disposición judicial, y se decretó su prisión provisional