Un operativo integrado por Policía Local, técnicos del área de Infraestructuras y de Gobierno Interior han coordinado esta actuación que tiene por objetivo evitar que estas “casas piloto” de una antigua promoción que fueron edificadas en terrenos municipales vuelvan a ser ocupadas.
Hay que recordar que en 2015 estas “casas piloto” fueron ocupadas por primera vez y el Ayuntamiento las desalojó y tapió en 2017. Posteriormente, se volvieron a ocupar y se inició el procedimiento para desalojarlas de nuevo.
La actuación de este martes tenía como objetivo solucionar de forma definitiva los problemas de convivencia que los vecinos habían denunciado en estos espacios. Las tareas para derribar las cuatro casas y eliminar los escombros cuentan con un presupuesto aproximado de 15.000 euros y la previsión es que queden terminadas este viernes.
Los vecinos de la urbanización llevaban mucho tiempo denunciando las condiciones en las que se encontraban estas viviendas así como por la presencia en las mismas de familias que las habían ocupado. Los vecinos ha seguido insistiendo en las malas condiciones de salubridad que presentaba la zona.