La gran mayoría de aficionados y simpatizantes rojillos, totalmente bienintencionados y de buena fe, creyeron que tras la aprobación del convenio de acreedores, con la rebaja y planificación de la deuda, los dos bandos en disputa optarían por pactar una tregua indefinida en beneficio del club.
Ahora bien, tal y como ha ido adelantando sucesivamente este digital, la paz era totalmente provisional. Las últimas movidas (caso Alfaro, abandonos en el palco de autoridades, movidas de peñas, autorizaciones de administradores, etc.) demuestran que las hostilidades han regresado con la máxima virulencia y presididas ya por un indisimulado rencor.
Un elemento que está favoreciendo al bando contrario a Serra, totalmente accidental y no previstos por la oposición, son las dudas que presenta el proyecto deportivo de Caparrós. El mandatario pobler es consciente que el fracaso deportivo va a ser un arma fundamental para sus contrarios y ya está inmerso en reforzar al equipo en el mercado de invierno, y prepara su réplica jurídica una vez que cesen en su mandato los supervisores judiciales.
Como ya fueron puntual y verazmente informados por este digital hace ya meses, sigan sentados en su sillón, agárrense fuertemente que las curvas ya están aquí y eso no ha hecho más que empezar.