El Mallorca consiguió el billete para los octavos tras imponerse al Sporting (0-2). El tanto de Juan Muñiz en la ida no sirvió de nada y los bermellones acabaron llevándose el gato al agua. Los de Caparrós marcaron por mediación de Nsue y merced a un tanto de Menéndez en propia meta.
Los rojillos han vuelto a ejercer de verdugos del cuadro asturiano sólo un año después, con este resultado se meten en los octavos de final de la Copa de l Rey y olvidan el mal resultado cosechado la pasada jornada de liga contra el Getafe.
Para este duelo, Caparrós alineó a los menos habituales para que fueren cogiendo minutos de juego y no le defraudaron. Ahora los bermellones cogen unos días de vacaciones por el parón navideño para después centrarse en su verdadero objetivo que pasa por ganar al Levante en la siguiente jornada del campeonato liguero.