Descubierta una nueva finca de los horrores en el municipio mallorquín de Llubí. Un desguace donde se permite que perros y gatos estén hacinados sobre sus propios excrementos, sin agua ni comida, en jaulas atados con un palmo de cadena con el peligro de poder ahorcarse, entre hierros y escombros. El partido animalista Progreso en Verde se está encargando de recoger las denuncias de los vecinos en otro caso grave de maltrato animal, que también afecta "a loros y gallos, ambos en condiciones terribles".
Desde la formación animalistas apuntan que "hay contaminación del suelo, escombros, chatarra por todos lados. ¿Y qué hace el Ayuntamiento de Llubí y la Policía Local sabiendo todo esto? Defender al presunto maltratador de animales y darle la espalda a los vecinos que han denunciado dicha situación ante el propio Ayuntamiento, Policía, Guardia Civil y Seprona".
"A pesar de las denuncias interpuestas Ayuntamiento y Policía siguen permitiendo tanto el maltrato animal como la contaminación del suelo y tampoco han protegido a los vecinos denunciantes ante las represalias del presunto maltratador", subrayan.
"A pesar de qué el presunto maltratador lo niega todo, sabemos que la Guardia Civil ha inspeccionado el lugar y ha visto las condiciones en las que están los animales.Lo que está pasando en Llubí es muy habitual en Mallorca. Estamos cansados de denunciar casos similares en Campanet, Andratx, La Vileta, Sa Indioteria, Felanitx y nunca pasa nada", agregan.
Desde Progreso en Verde aseguran que "ninguna administración mueve un dedo contra el maltrato animal, ni contra los presuntos maltratadores. Mueren animales en condiciones terribles o malviven hasta su muerte sin que nadie haga nada. La consellería de Agricultura es de una incompetencia sin precedentes. Jamás protege a los animales".