"El objetivo es proteger los sitios más característicos del barrio desde el punto de vista patrimonial y tipológico", ha explicado en rueda de prensa, a lo que ha añadido que "hay que proteger Santa Catalina para que pueda conservar su esencia".
En esta línea, ha detallado se trata de "una normativa específica" para este barrio, es decir, "un plan especial con una normativa específica adaptada al entorno histórico de Santa Catalina, sus edificaciones, espacios públicos y calles".
En concreto, ha subrayado que este martes se ha aprobado este plan inicial, que el miércoles pasará a la Junta de Govern para iniciar un tiempo de alegaciones y finalmente llevar la propuesta al pleno para su aprobación definitiva.
Por su parte, el gerente de Urbanismo, Joan Riera, ha especificado que uno de los objetivos de este plan será "armonizar lo máximo posible el barrio" tipificando un número máximo de plantas por edificio. "Dentro del barrio habrá máximo tres alturas", en la mayoría de los casos, "aunque hay calles como Joan Crespí donde se permitirá una planta baja y cuatro alturas", ha concluido.