Tal y como se había previsto, en la mañana del miércoles únicamente se ha tirado una de las dos viviendas ubicadas en la calle Tres del poblado, a la espera de encontrar una solución habitacional para la familia afectada.
La otra casa, que se utilizaba como tienda, ha sido desmontada y derribada. La próxima semana continuará el proceso de desmantelamiento del poblado.
Hay que recordar que está previsto que la primera fase que afecta a 45 viviendas finalice a finales de marzo.
Desde que se inició el proceso de desmantelamiento han salido de Son Banya un total de 21 familias.