Asimismo, otras dos personas están adjuntas a la causa, aunque actualmente se encuentran en paradero desconocido, y una tercera ha fallecido.
En la sesión de este martes, los seis acusados han llegado a un acuerdo con la Fiscalía. A todos ellos se les ha impuesto una condena de dos años de prisión, menos al líder del grupo, que deberá cumplir tres años y un día, y al sexto, que se enfrentará a un año de cárcel. Asimismo, deberán pagar multas por valor de 37.700 euros, que en un primer momento ascendían a 100.200.
LOS HECHOS
Los hechos ocurrieron desde, al menos, el mes de marzo de 2013 y hasta septiembre del mismo año, cuando los acusados se dedicaban a vender y distribuir, concretamente, cocaína, hachís y cannabis.
Cada uno de los acusados desempeñaba una función concreta, siendo uno de ellos el encargado de distribuir estas sustancias en el municipio, donde disponía supuestamente de otras personas que colaboraban con él para su venta en menor grado.
Además, esta persona era quien daba las directrices para el desarrollo de la actividad ilegal, la cual se desplegaba desde un bar de Inca, del que era propietario, aparentemente explotado como venta de Kebab.
La Policía, a través de la operación 'Amanecer Blanco', procedió a su seguimiento e investigación, lo que llevó a localizar al resto de condenados.
En los registros, los agentes intervinieron básculas de precisión para confeccionar el peso de las dosis, sustancias anabolizantes, pistolas de descarga eléctricas, terminales de telefonía móvil, dinero, dos vehículos y hasta 15.000 gramos de marihuana y 1,8 de cocaína.
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