Si bien es cierto que innumerables aspectos adquieren importancia al casarse, para las chicas uno de los factores más trascendentales es el de la cabellera. Independientemente de si elementos como el velo o incluso una tiara estarán presentes en la testa de la novia, es fundamental que el pelo luzca una apariencia inmejorable.
Así pues, no es de extrañar que uno de los mayores quebraderos de cabeza en los preparativos de la boda se resuma en elegir el mejor peinado. Si tú también estás indecisa no dudes en poner en práctica las siguientes claves, dando pie todas ellas a que aciertes de lleno con tu decisión.
¿Bajo presupuesto? Alternativas caseras
A raíz de la crisis económica que afectó a todos los españoles, incluyendo los mallorquines, las bodas low-cost empezaron a popularizarse. Hoy en día siguen siendo una realidad, aunque no desmerecen en comparación con aquellas que se celebran sin reparar en gastos.
Una buena muestra de ello es la de los peinados realizables manualmente de forma casera. Por ejemplo, un alisado propio del mejor catálogo de belleza puede conseguirse fácilmente haciendo uso de una plancha babyliss, siendo una de las marcas preferidas por las novias debido a la sencillez que traslada a la hora de obtener los resultados que desea cada futura esposa.
No solo un perfecto alisado es conseguible sin necesidad de acudir a una peluquería –con el notable ahorro económico que ello supone–, sino también otras alternativas que son idóneas para la celebración de un enlace matrimonial. Así lo demuestra el moño trenzado que, si bien es algo más complejo, con paciencia acaba quedando espectacular.
Tendencias de peluquería profesional
Si por el contrario pretendes invertir todo lo necesario en la elaboración de un peinado cuya belleza asombre a cada uno de los presentes, especialmente a tu futuro esposo, en pleno 2019 son muy variadas las tendencias que se encuentran en pleno auge.
Entre las más populares merece una mención especial el estilo griego. Los rostros que destilan finura y cierto grado de curvatura pasan a ver potenciados sus rasgos faciales más si cabe, convirtiéndose ésta en la principal elección de muchas chicas que dirán el “sí quiero” engalanadas capilarmente para la ocasión.
Aunque existe la posibilidad de hacérselo una misma, dada su complejidad conviene acudir a una peluquería en la que te atiendan profesionales e incluso te recomienden los mejores accesorios, tales como una diadema que congenie a la perfección no solo con la forma de la cabellera, sino también con la tonalidad del citado elemento.
Lo mismo sucede en caso de decantarte por otra tendencia de mucho éxito en los tiempos que corren. Efectivamente, nos referimos al corte bob clásico que años atrás popularizó Victoria Beckham y que a día de hoy se deja ver en múltiples mallorquinas no solo en bodas, sino también en eventos que requieren cierta formalidad.
¿Recinto interior o lugar exterior?
Nos encontramos en época de bodas y, precisamente, tanto el final de la primavera como todo el verano en general suelen ser dos estaciones en las que es difícil prever el tiempo que hará. Sin embargo, un enemigo de ciertas cabelleras puede aparecer prácticamente en cualquier momento: el viento.
Tenlo muy en cuenta si pretendes casarte en un lugar exterior, ya que en tal caso los moños e incluso el peinado griego anteriormente descrito no correrán demasiados riesgos, mientras que aquellos que le otorgan relevancia a la melena en sí, desde los alisados hasta los peinados sueltos, podrían sufrir alteraciones visuales difíciles de deshacer.
Por el contrario, si el enlace matrimonial tendrá lugar en una ubicación interior, sin riesgo a que las inclemencias meteorológicas jueguen en tu contra, podrás elegir entre un mayor abanico de peinados.
Ten en cuenta el estilo del vestido
Enhorabuena, has dado con un peinado que te favorece. Pero, ¿y si no contrasta especialmente bien con el vestido? Esta situación acostumbra a darse en muchas mujeres que pasan por alto la necesidad de combinar ambos aspectos.
Tanto la forma de la espalda como el escote afectan de lleno a los cortes de pelo que serán idóneos. En este sentido conviene contar con la recomendación de una profesional con una dilatada trayectoria a sus espaldas.
La confortabilidad también es importante
Hasta ahora nos hemos centrado en los factores visuales, pero en una boda no solo importa la apariencia. Y es que los enlaces matrimoniales acostumbran a durar aproximadamente unas nueve o diez horas. ¡Imagínate estar incómoda a lo largo de todo ese tiempo!
Impedirlo está en tus manos, así que por mucho que te convenza a nivel visual un peinado de lo más bonito, es esencial que lo descartes si te traslada la más mínima incomodidad. Las tiranteces y otras adversidades han de ser evitadas a toda costa para que puedas dedicarte al cien por cien a gozar de un día que nunca olvidarás.