Calvo todo, Calvo nada

El mismo día que vimos a Miley Cyrus encendiéndose un porro encima de un escenario, Aina Calvo encendía los fuegos artificiales en el seno del PSIB-PSOE. Ya ha bajado el soufflé para una y para otra, aunque ambas tendrán nuevas oportunidades para intentar brillar.

La apuesta de Aina Calvo es un todo o nada. Bien haría su partido en ir buscando con urgencia quién va a comandar el grupo municipal socialista en el Ajuntament de Palma. No debería ser Calvo a medio plazo.

Supondré a Calvo un nivel de inteligencia que le habrá permitido calcular los riesgos de su prematuro anuncio de querer ser candidata socialista a presidir el Govern. Ella conoce su partido mejor que yo. Y conoce mejor que yo los tiempos de la política. Tiempos que, con la lógica en la mano, la van a apartar de su actual cargo de responsabilidad. Es un todo o nada.

En el primer semestre de 2014 tendrían que celebrarse las primarias a las que opta Calvo. Si las gana, será candidata. Por tanto, ya no hace nada en Cort. Tendrá otras prioridades: trabajar para batirse con un Bauzá precandidato.

En cambio, puede perder las primarias. Un escenario posible lo anuncia la encuesta de mallorcadiario.com que la deja muy lejos de Joan Mesquida, si el exconseller decide presentarse. Pongámonos en una victoria de Mesquida o de Armengol frente a Calvo: debería marcharse a su casa, a su UIB, o a donde ella escoja para retirarse de la primera línea política. Es lo que tienen los fracasos.

Y para cualquiera de estos escenarios, estamos hablando de muy pocos meses. Vayan haciendo apuestas para quién, en el grupo municipal, puede sustituirla en Cort, como jefa de la oposición, y como candidato en 2015.

¿O también habrá primarias para candidato a alcalde?